Cuando un país solicita un préstamo al FMI, el gobierno acuerda ajustar sus políticas económicas para superar los problemas que lo llevaron a tener que pedir asistencia financiera. Estos ajustes de política económica son condiciones para recibir préstamos del FMI y contribuyen a que el país adopte políticas sólidas y eficaces.
La condicionalidad contribuye a que los países resuelvan sus problemas de balanza de pagos sin tener que recurrir a medidas que perjudiquen la prosperidad nacional o internacional. Además, las medidas aspiran a proteger los recursos del FMI al asegurar que las finanzas del país sean lo suficientemente sólidas para pagar el préstamo, de forma que otros países puedan utilizar los recursos en el futuro si lo necesitan. La condicionalidad se incluye en los programas financieros y no financieros del FMI con el objetivo de avanzar hacia los objetivos de política económica que se han acordado.
La responsabilidad principal de elegir, diseñar y ejecutar las políticas que garanticen el éxito del programa económico recae sobre los países miembros que solicitan un préstamo del FMI. El programa se describe en una carta de intención, que suele incluir un memorando de política económica y financiera con una descripción más detallada de las políticas. Los objetivos y las políticas del programa dependen de las circunstancias de cada país.
El objetivo general siempre es restaurar o mantener la viabilidad de la balanza de pagos y la estabilidad macroeconómica, así como sentar las bases para un crecimiento sostenido de alta calidad. En el caso de los países de ingreso bajo, también se tiene el objetivo de reducir la pobreza.
La mayor parte del financiamiento del FMI se desembolsa en pagos parciales, vinculados a medidas de política demostrables. Los compromisos en materia de política económica pueden adoptar distintas formas, que incluyen:
Se trata de medidas que el país acuerda adoptar antes de que el FMI apruebe el financiamiento o lleve a cabo un examen del programa. Garantizan que el programa cuente con las bases necesarias para tener éxito.
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Ejemplos |
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Medidas relativas a los ingresos fiscales |
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Regularización de atrasos externos |
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Reforma de la estructura de gobierno |
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Plan de reestructuración del sector bancario |
Criterios de ejecución cuantitativos
Se trata de condiciones para obtener un préstamo del FMI, específicas y medibles, que tienen que ver siempre con variables macroeconómicas bajo el control de las autoridades del país. Entre estas variables se encuentran los agregados monetarios y crediticios, las reservas internacionales, los saldos fiscales y el endeudamiento externo.
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Ejemplos |
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Tope máximo a las nuevas garantías públicas |
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Tope máximo a la deuda externa |
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Tope máximo a los atrasos externos del sector público |
Metas indicativas
Con el fin de realizar un seguimiento de los avances en el cumplimiento de los objetivos del programa, pueden establecerse metas indicativas, que son medidas numéricas flexibles de seguimiento, para los indicadores cuantitativos. En ciertas circunstancias, cuando la incertidumbre es elevada y la capacidad limitada, puede estar justificado un mayor uso de metas indicativas. Cuando la incertidumbre se reduce, estas metas pueden pasar a ser, con las modificaciones adecuadas, criterios de ejecución cuantitativos.
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Tope máximo a la masa salarial del gobierno general |
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Tope máximo a los atrasos internos |
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Tope máximo al endeudamiento público frente al banco central |
Parámetros de referencia estructurales
Se trata de indicadores sobre las reformas que no suelen poder cuantificarse, pero que son fundamentales para lograr los objetivos del programa y que se utilizan para evaluar su ejecución.
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Ejemplos |
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Reforzar la administración tributaria |
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Mejorar la transparencia fiscal |
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Mejorar la lucha contra la corrupción y el Estado de derecho |
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Reformar las empresas públicas y su estructura de gobierno |
El Directorio Ejecutivo del FMI realiza exámenes periódicos de los programas para evaluar si están bien encaminados o si necesitan un ajuste a la vista de nuevos acontecimientos. Si el país no satisface alguno de los criterios de ejecución cuantitativos, el Directorio Ejecutivo del FMI puede aprobar una dispensa si está convencido de que aun así el programa tendrá éxito. Este puede ser el caso cuando la desviación es pequeña o temporal, o cuando las autoridades nacionales están adoptando medidas correctivas. Los parámetros de referencia estructurales y las metas indicativas que no se cumplen no requieren dispensas, pero se evalúan en el contexto del desempeño general del programa. La base de datos MONA sobre el seguimiento de los acuerdos del FMI, de acceso público, abarca todos los aspectos de la condicionalidad de los programas.
Los préstamos del FMI siempre han incluido condiciones en materia de política económica. Hasta principios de la década de 1980, la condicionalidad del FMI se centraba principalmente en las políticas macroeconómicas. La complejidad y el alcance de las condiciones aumentaron con la creciente implicación del FMI en los países en transición y de ingreso bajo, donde son múltiples los problemas estructurales que pueden dificultar la estabilidad y el crecimiento económicos.
Con el tiempo, el FMI ha aumentado la flexibilidad en su forma de trabajar con los países en reformas estructurales, y su planteamiento sobre la condicionalidad continúa evolucionando. El FMI examina de forma periódica el desempeño de sus programas. El examen más reciente, de 2018, de la condicionalidad y el diseño de los programas supuso un primer balance exhaustivo de los programas del FMI desde la crisis financiera mundial.
Con el fin de afianzar los resultados y reducir los riesgos, el examen recomendaba medidas para mejorar las proyecciones macroeconómicas, perfeccionar el análisis de sostenibilidad de la deuda y adecuar mejor las condiciones estructurales a las circunstancias específicas del país.
