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La sociedad civil y el FMI

Foto: David Wimsett/UPPA/ZUMA Press

(photo: David Wimsett/UPPA/ZUMA Press)

La Cumbre del Grupo de los Veinte (G-20): Conclusiones y próximos pasos

15 de abril de 2009

El Grupo de los Veinte (G-20) países industrializados y de mercados emergentes acordó triplicar la capacidad prestable del Fondo Monetario Internacional (FMI) elevándola a US$750.000 millones, a fin de brindar asistencia a los países afectados por la crisis. El G-20 también debatió la necesidad de adoptar reformas adicionales relativas a la concesión de préstamos y la condicionalidad del FMI, e instó a la institución a acelerar la ejecución de la actual reforma de su gestión de gobierno y de las cuotas.

La Cumbre del Grupo de los Veinte (G-20): Conclusiones y próximos pasos

En la Cumbre del G-20, realizada el 2 de abril en Londres, se adoptaron medidas de política decisivas para la reactivación de la economía mundial. El acuerdo de los líderes del G-20 sobre la triplicación de la capacidad prestable del FMI, que llegará a US$750.000 millones, demuestra su compromiso en materia de apoyo al crecimiento de los países de mercados emergentes y de bajo ingreso. Los líderes del G-20 también reconocieron que la crisis se originó en los países desarrollados y respaldaron la toma de medidas de política urgentes orientadas a asistir a los países de bajo ingreso vulnerables que están siendo afectados por la desaceleración económica, en especial en África subsahariana.

Conclusiones de la Cumbre

A continuación se detallan las conclusiones clave de la Cumbre:

• En la Cumbre se definió como meta la duplicación de la concesión de préstamos concesionarios del FMI a los países más pobres del mundo. La triplicación de los recursos generales del FMI, que totalizarán US$750.000 millones, se realizará en dos etapas: 1) a través de acuerdos bilaterales, posiblemente por medio de bonos emitidos por el FMI; y 2) mediante una ampliación de los Nuevos Acuerdos para la Obtención de Préstamos. El FMI se ha comprometido, en consonancia con el nuevo modelo de ingresos, a que durante los próximos dos a tres años se utilicen ventas adicionales de sus reservas de oro, combinadas con ingresos excedentes, para ofrecer US$6.000 millones adicionales en concepto de financiamiento mediante préstamos concesionarios y flexibles a los países más pobres.

• El G-20 también solicitó la duplicación de los límites de acceso a los mecanismos financieros para la concesión de préstamos concesionarios. Esto permitirá al FMI ayudar de manera más eficaz a los países de bajo ingreso a satisfacer las necesidades de financiamiento que enfrentan a raíz de la crisis mundial.

• Los líderes del G-20 también dispusieron que el FMI realizara una nueva asignación general de derechos especiales de giro (DEG), que incrementará la liquidez en el mundo mediante la inyección de US$250.000 millones en la economía mundial. Los detalles se definirán en los próximos meses, y la asignación de los DEG proporcionará un impulso significativo a las reservas internacionales de los países de África.

• El G-20 también afirmó la necesidad de realizar acciones coordinadas en materia de política fiscal a través de programas de estímulo fiscal. Asimismo, se trataron las disposiciones relativas a la regulación del sector financiero, y se llegó a un consenso para mejorar dicha regulación, a fin de evitar una nueva crisis similar a la actual.

• El Grupo también trató la crisis bancaria y la necesidad de sanear los balances de los bancos, a fin de lograr una recuperación económica a principios de 2010. El FMI está preparado para participar plenamente en las iniciativas orientadas a revisar las normas que rigen los mercados financieros.

• Los líderes del G-20 también solicitaron al FMI que lleve a cabo evaluaciones regulares de las economías mundiales y que brinde un sistema mejorado de alerta anticipada, a fin de evitar una nueva crisis. Un sistema de ese tipo requerirá, además del establecimiento de las herramientas y procesos adecuados, que los gobiernos se comprometan a prestar atención a las señales de alerta, así como también una garantía de confidencialidad dentro del FMI.

Cambios en la condicionalidad y la reforma de la gestión de gobierno

Los líderes del G-20 brindaron todo su apoyo a las reformas del FMI sobre la concesión de préstamos y la condicionalidad, en especial a la creación de la nueva Línea de Crédito Flexible. En los últimos meses, la prioridad del FMI fue garantizar que se siga otorgando una asistencia rápida a los países emergentes y en desarrollo golpeados por la crisis, con una condicionalidad modernizada, ajustada a las prioridades de abordar la crisis sin dejar de garantizar que los sectores vulnerables de la población estén protegidos de manera adecuada. El FMI también está tratando de limitar las condiciones de sus préstamos a los términos que sean esenciales para resolver los problemas económicos inmediatos de los países.

Los líderes mundiales también solicitaron al FMI que ponga en vigor el paquete de reformas del sistema de cuotas y representaciones acordado en abril de 2008, que constituye la primera parte del proceso de reforma de la gestión de gobierno del FMI. Además instaron al FMI a acelerar la próxima revisión general de cuotas, con el objeto de que esté terminada antes de enero de 2011, dos años antes de la fecha fijada originalmente. El FMI está comprometido con el desarrollo de estas reformas. Para esto también será preciso que los países miembros actualicen sus legislaciones internas.

Se han dado muchos pasos, y en los próximos meses habrá más cambios. Con este fin, el Director Gerente y los altos funcionarios del FMI mantendrán una serie de reuniones con representantes de la sociedad civil durante las Reuniones de Primavera.