La sociedad civil y el FMI
"P. Changal Reddy, Secretario General del Consorcio de asociaciones de granjeros indios, entrega un chal a Dominique Strauss-Kahn en nombre de la comunidad granjera.
Strauss-Kahn advierte a entidades civiles que la crisis financiera puede afectar gravemente a los países de bajo ingreso
14 de octubre de 2008
En una reunión de debate abierto con organizaciones de la sociedad civil (OSC), celebrada el jueves 9 de octubre, Dominique Strauss-Kahn, Director Gerente del FMI, advirtió que la crisis financiera probablemente tenga un fuerte impacto en las economías avanzadas y que los países de bajo ingreso también podrían ser gravemente afectados. "Todos debemos instar a los países desarrollados para que no cejen en su compromiso de brindar ayuda", señaló ante un auditorio de más de 100 organizaciones de la sociedad civil.
La reunión de debate abierto de OSC con el Director Gerente del FMI y el Presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, ha pasado a ser una tradición de las Reuniones Anuales. Si bien Strauss-Kahn ya había interactuado informalmente con las OSC en las Reuniones de Primavera, esta fue su primera reunión de debate abierto con ellas y fue uno de los puntos culminantes del Foro sobre políticas relativas a la sociedad civil, que organizan el FMI, el Banco Mundial y las mismas OSC durante las Reuniones Anuales y que consiste en una serie de aproximadamente 30 sesiones.
El debate abierto fue moderado por Ingrid Srinath, Secretaria General de CIVICUS, una alianza mundial de organizaciones de la sociedad civil cuya sede se encuentra en Sudáfrica. Srinath expresó que las autoridades de las instituciones tienen una "perspectiva de ojo de águila" de lo que está aconteciendo en la economía mundial, en tanto la visión del universo que tienen las organizaciones de la sociedad civil se asemeja a la de un gusano. Añadió que la reunión de debate abierto era propicia "para que las águilas y los gusanos intercambien puntos de vista".
En sus palabras de apertura, Strauss-Kahn subrayó la extrema gravedad de la situación de los mercados financieros mundiales, y señaló las consecuencias a largo plazo de los desequilibrios del sector financiero en el crecimiento. A pesar de que el año próximo el crecimiento de las economías avanzadas no será mayor a cero, el crecimiento global de la economía mundial se ubicará en torno al 3% y provendrá de los países emergentes y de los países de bajo ingreso. Añadió que a raíz de la crisis el crecimiento mundial se producirá gracias a los países de mercados emergentes y los países de bajo ingreso.
Strauss-Kahn también instó a los participantes de las organizaciones de la sociedad civil a no olvidar la otra crisis: el alza de los precios de los alimentos y los combustibles que estaban teniendo un efecto negativo en los países de bajo ingreso. Señaló que si bien se ha contraído el compromiso de brindar una ayuda cuantiosa, esta todavía no ha sido desembolsada y las perspectivas son desalentadoras por la difícil situación presupuestaria de las economías avanzadas. Strauss-Kahn manifestó que ha estado exhortando a los países donantes a no suprimir la ayuda que prometieron brindar y a no transferir la crisis a otras partes del mundo "donde la crisis significa algo mucho más grave que una mera disminución del poder de compra".
Añadió que las crisis gemelas que afronta la economía mundial demostraron la necesidad de efectuar cambios en la arquitectura financiera internacional y en la estructura de la gestión de las instituciones internacionales. Expuso los cuatro pilares que dan base a su plan de reformas de la gestión de gobierno del FMI: el informe de la Oficina de Evaluación Independiente (OEI) sobre la "gestión de gobierno del FMI"; el grupo de trabajo de los directores ejecutivos del FMI; la comisión de notables cuya labor está en curso, y la interacción directa con las organizaciones de la sociedad civil, que abrigan el propósito de generar un amplio consenso sobre este proceso en curso. Añadió que "no es posible trabajar sobre la gestión sin este cuarto pilar": las consultas con la sociedad civil.
En su alocución, Zoellick, Presidente del Banco Mundial, señaló que desde que ingresó al Banco Mundial en 2007 le ha complacido apreciar la profundidad y amplitud de la variada labor de la institución con grupos de la sociedad civil. Respecto a la crisis de los alimentos y los combustibles manifestó que la lucha contra la desnutrición es el Objetivo de Desarrollo del Milenio que ha sido olvidado. Si bien forma parte del primer ODM, también es el objetivo multiplicador porque el efecto más triste de la desnutrición es que puede atrofiar a la gente de por vida. Coincidió con Strauss-Kahn en que los efectos de la crisis financiera se harán sentir en muchos países en desarrollo. Señaló que "podríamos encontrarnos en un punto límite en cuanto a los efectos sobre su crecimiento" y sus sistemas financieros.
En el debate que tuvo lugar posteriormente, los representantes de las organizaciones de la sociedad civil formularon preguntas a Strauss-Kahn y Zoellick sobre diversos temas, entre ellos, el crecimiento como motor del desarrollo. Strauss-Kahn respondió que el crecimiento no siempre ha sido beneficioso para el desarrollo, como lo ha demostrado claramente la experiencia de África occidental en estos últimos cinco o seis años. En el último quinquenio la región experimentó una tasa de crecimiento próxima al 5% o 6%, algo que no había sucedido en 30 años, pero su efecto sobre la reducción de la pobreza ha sido casi nulo. Señaló que si bien es difícil combatir la pobreza sin crecimiento, el crecimiento no basta por sí solo. "También se necesitan políticas económicas acertadas para aliviar la pobreza", añadió. Por esta razón el FMI está trabajando con los países para brindar un entorno económico que posibilite el desarrollo. "Pero también tenemos en cuenta que no podemos basarnos solamente en cualquier clase de crecimiento o exclusivamente en el crecimiento para combatir la pobreza", manifestó.