EI FMI y África: Una panorámica
África procura sentar las bases para el crecimiento
La capacidad de escuchar y el diálogo son los dos elementos que definen
cada vez más las relaciones del FMI con los países africanos y la sociedad
civil. El FMI ha solicitado con vivo interés las opiniones de jefes
de Estado, funcionarios públicos, representantes de empresas y sindicatos
y de la sociedad civil de África, y sus consejos se han traducido en
una condicionalidad simplificada y mayor identificación de los países
con los programas de reforma (véase "Condicionalidad").
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Los Presidentes de Cabo Verde, Pedro Pires; Ghana,
John Kufuor; Malí, Alpha Omar Konare; el Secretario Ejecutivo de
la CEDEAO, Mohamed Chambas; y los Presidentes de Senegal, Abdoulaye
Wade; Côte d’Ivoire, Laurent Gbagbo; Nigeria, Olusegun Obasanjo,
y Benin, Mathieu Kerekou, en la cumbre de la Nueva Asociación para
el Desarrollo de África, mayo de 2002. |
Por ejemplo, la búsqueda de esta identificación de los países ha sido
primordial en la elaboración del documento de estrategia de lucha contra
la pobreza, proceso que sufrió un examen exhaustivo (véase "Reducción
de la pobreza"). El FMI y el Banco Mundial están trabajando arduamente
para lograr el éxito de la Iniciativa reforzada para los países pobres
muy endeudados y para ofrecer un alivio de la deuda más amplio, profundo
y rápido y fortalecer los vínculos entre el alivio de la deuda, la reducción
de la pobreza y la política social (véase "Estrategia
ante la deuda"). También hay una mayor aceptación de que el
buen asesoramiento económico no es independiente de la comprensión de
los procesos políticos y la dimensión social del desarrollo
Hay dudas sobre el vigor
de la recuperación de la economía mundial |
Al momento de los ataques terroristas del 11 de septiembre
de 2001 a Estados Unidos, el crecimiento económico
mundial era débil, pero la desaceleración que se inició
a mediados de 2000 parecía estar próxima a tocar fondo.
Algunos países principales (Estados Unidos, Japón
y Alemania) estaban en recesión o cerca de ella, pero
otros (China, India y Rusia) mantenían un fuerte ímpetu
de crecimiento.
Los ataques terroristas suscitaron nuevas dudas,
pero los efectos económicos inmediatos de los ataques
resultaron moderados. A principios de 2002, al parecer
se había iniciado una recuperación económica mundial
liderada por Estados Unidos. No obstante, a mediados
de año, la atonía de los mercados emergentes y de
los mercados accionarios maduros, indicaban un aumento
de la aversión al riesgo entre los inversionistas.
Este sentimiento, a su vez, creó dudas sobre la solidez
de la recuperación. Las dificultades financieras de
algunas economías de mercados emergentes, sobre todo
de América Latina, indicaban, al mismo tiempo la importancia
de que el FMI siguiera trabajando en la prevención
y resolución de crisis.
El Suplemento del Boletín del FMI describe las
políticas y operaciones de la institución en el marco
de la evolución eco-nómica y financiera mundial y
se actualiza cada año en función de los cambios suscitados
por los sucesos mundiales. Una novedad del Suplemento
del Boletín del FMI es la sección especial sobre el
FMI y África. En el futuro, se seguirán
elaborando secciones especiales sobre temas a los
que el FMI haya dedicado gran atención en el ejercicio
examinado.
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Cada vez más, el FMI considera que el progreso en los países africanos
puede mostrar el camino a seguir. Los propios líderes africanos han
diseñado y pondrán en práctica la Nueva Asociación para el Desarrollo
de África, un plan para reactivar el continente y acabar con su marginación.
En el marco de la Nueva Asociación, los países africanos se han comprometido
a fomentar la paz, la democracia y el buen gobierno; a diseñar e implementar
planes de desarrollo de los sectores de salud, educación, infraestructura
y agricultura que favorezcan a los pobres; a lograr la integración económica
regional y mundial construyendo un sector privado fuerte y creando un
clima propicio para la inversión interna y externa, y a desarrollar
alianzas más productivas con los socios bilaterales y multilaterales
en el desarrollo de África.
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Empresarios kenianos han iniciado la primera subasta
de café por Internet de África oriental. |
El FMI está comprometido a apoyar totalmente la Nueva Asociación. Consciente
de que el mayor obstáculo para el crecimiento sostenible de las economías
africanas no suele ser la falta de voluntad política sino de capacidades,
el FMI selló su compromiso creando Centros de Asistencia Técnica Regional
en África con sede en Abidján y Dar es Salam. En estos centros, expertos
residentes del FMI y especialistas contratados a corto plazo ofrecerán
ayuda a los países de África occidental y oriental para desarrollar
las capacidades locales de gestión económica y financiera. En estrecha
colaboración con el Banco Mundial, el Banco Africano de Desarrollo y
los donantes, el FMI se centrará en temas de su especialización básica
(política macroeconómica, política tributaria y administración de rentas,
gestión del gasto público, sector financiero y estadísticas macroeconómicas).
Estos centros, que empezarán a funcionar a finales de año, serán los
primeros de los cinco que se crearán en la región.
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Ghana fomenta el desarrollo de altas tecnologías
para reducir su dependencia de la minería y la agricultura. |
Por su capacidad de generar ingresos y reducir la dependencia de la
ayuda, el comercio es una importante fuente de autoayuda y la piedra
angular de la Nueva Asociación, y es un arma esencial en la lucha contra
la pobreza. Un respaldo mayor y más coordinado de los países ricos en
forma de flujos de ayuda más generosos también es un componente importante
de esta lucha. El FMI sigue exhortando a los países industriales a que
incrementen su asistencia para el desarrollo de los países pobres que
aplican políticas acertadas y a que abran sus mercados eliminando subsidios
y otras barreras que distorsionan el comercio.
El FMI también apoya una mayor implementación de iniciativas regionales
en África, como forma de incrementar el acceso a los mercados internos
y externos, mejorar la competitividad e impulsar el crecimiento económico.
La cooperación y la integración regional son esenciales para el desarrollo
de África (véase recuadro).
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Centro médico en Burkina Faso: Un buen ejemplo
de atención a la salud en el marco de la Nueva Asociación. |
La implementación del “Consenso de Monterrey”, que surgió de la Conferencia
Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo realizada en
Monterrey, México, en marzo de 2002 (véase recuadro),
es un importante paso de la comunidad internacional en su empeño por
mejorar las condiciones de vida en África. El FMI sigue comprometido
con este empeño mundial a través de su asesoramiento de política económica
y su asistencia financiera y técnica.
Respaldo a la integración regional |
África oriental y meridional
En África oriental y meridional, se está fomentando
la integración regional mediante varios acuerdos subregionales,
a los que a veces pertenecen los mismos países. Entre
éstos figuran la Comunidad del Desarrollo de África
Meridional (SADC), que está creando una zona de libre
comercio para 2008, el Mercado Común para África Meridional
y Oriental (COMESA), que creó una zona de libre comercio
entre nueve de sus miembros en 2000 y planea una unión
aduanera para 2004; la Unión Aduanera de África Meridional
(SACU); y la Comunidad de África Oriental (CAO), que
planea una zona de libre comercio y un arancel externo
común para 2004. Los objetivos a largo plazo de COMESA
y CAO incluyen una moneda común y, en el caso de la
SADC, la formulación de pautas para la convergencia
de las políticas macroeconómicas y el fomento de la
estabilidad económica.
El FMI brinda respaldo analítico y asesoramiento
a las secretarías de la SADC y el COMESA sobre temas
comerciales y macroeconómicos, así como sobre la modernización
y la reforma del sector financiero, las estadísticas
macroeconómicas y el impacto fiscal de la reforma
del comercio. El FMI también apoya el trabajo del
Foro para la Facilitación de la Integración Regional
(FFIR), sobre todo en sus planes de fomento de la
reforma económica, coordinación de las actividades
de integración regional y supervisión de las políticas
macroeconómicas y otras políticas conexas.
África occidental
Los planes de integración en África occidental se subdividen
en dos zonas de la Comunidad Económica de los Estados
de África Occidental (CEDEAO), creada hace 27 años e
integrada por 14 estados. No obstante, la integración
regional no ha avanzado al ritmo propuesto. En particular,
la zona de libre comercio hipotética es ineficaz.
Ocho integrantes de la CEDEAO pertenecen a un grupo
regional más pequeño, la Unión Económica y Monetaria
del África Occidental (UEMAO), cuya moneda común es
el franco CFA, que emite un banco central común, el
Banco Central de los Estados del África Occidental
(BCEAO), y que ha estado vinculado al franco francés
desde 1948 y al tipo de cambio de conversión entre
el franco francés y el euro desde 1999. La UEMAO es
la agrupación más avanzada de África en la senda de
la integración. Además de mantener con éxito la unión
monetaria por 52 años, sus miembros han aplicado criterios
de convergencia macroeconómica y un eficaz mecanismo
de supervisión, han adoptado una unión aduanera y
un arancel externo común (a principios de 2000), han
armonizado las normas sobre impuestos indirectos y
han emprendido políticas estructurales y sectoriales
regionales.
El FMI ha prestado considerable asistencia técnica
a la UEMAO y sus instituciones, apoyo analítico y
asesoramiento en política macroeconómica, fiscal y
comercial, y modernización y reforma del sector financiero.
Desde 1999, la UEMAO ha aprovechado los contactos
oficiales para complementar las consultas del Artículo
IV con sus países miembros.
En 2000, los otros seis miembros de la CEDEAO decidieron
crear una segunda zona monetaria (la Zona Monetaria
del África Occidental, ZMAO) en 2003, y fusionarla
con la UEMAO en 2004. El FMI está prestando asistencia
técnica al proyecto en áreas como gestión estadística
y de datos y capacitación al Instituto Monetario del
África Occidental (IMAO), una institución transitoria
creada para allanar el camino hacia un banco central
común. El FMI considera que la convergencia a nivel
de políticas entre las economías de la ZMAO no es
suficiente para cumplir el plazo establecido para
la unión monetaria.
África central
La integración en África central se concentra en la
Comunidad Económica y Monetaria de África Central (CEMAC),
que agrupa a seis países. La moneda común de la CEMAC
también es el franco CFA, emitido por el Banco de los
Estados del África Central (BEAC) y, que al igual que
el franco CFA de la UEMAO, ha estado vinculado al franco
francés desde 1948 y al tipo de cambio de conversión
entre el franco francés y el euro desde 1999. Pese a
haber mantenido una unión monetaria durante mucho tiempo,
los planes de integración de la CEMAC en otras áreas
no están muy avanzados. No se ha aplicado plenamente
el arancel externo común adoptado en 1994 y la armonización
de las políticas tributarias y la adopción de políticas
sectoriales y estructurales comunes ha sido lenta.
En el curso de los años, el FMI ha prestado asistencia
técnica a la CEMAC y sus instituciones, apoyo analítico
y asesoramiento en política macroeconómica, fiscal
y comercial, y modernización y reforma del sector
financiero. Desde 1999, se han realizado consultas
regionales oficiales para complementar las consultas
del Artículo IV con cada país miembro.
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Se inician las actividades de los Consejos Asesores
Mejora el clima para la inversión en África
A principios del presente año dio fruto la iniciativa conjunta del
Director Gerente del FMI, Horst Köhler, y el Presidente del Banco Mundial,
James Wolfensohn, con la inauguración de Consejos Asesores de Inversión
(CAI) en Ghana y Tanzanía con el fin de fomentar el diálogo entre el
gobierno y los altos funcionarios de empresas locales e internacionales
sobre la forma de mejorar el clima para la inversión.
El CAI de Ghana se creó en mayo de 2002 bajo el liderazgo del Presidente
John Kufuor, y la participación de Köhler y altos ejecutivos ghaneses
y extranjeros. En su sesión inaugural, el consejo identificó varias
áreas prioritarias para la actuación del gobierno, entre ellas: reformas
de las reglas relativas a la propiedad de la tierra, la minería y el
trabajo; seguridad; infraestructura, especialmente de energía, telecomunicaciones
e informática; infraestructura de servicios financieros; consideración
del sector privado por parte del sector público; restablecimiento de
la competitividad del sector minero; dependencia de la ayuda y exportación
de productos básicos y necesidad de alianza entre el gobierno, la industria
privada y los trabajadores. El consejo se reunirá nuevamente en noviembre
para evaluar los avances y actualizar sus recomendaciones.
La mesa redonda de inversionistas de Tanzanía, liderada por el Presidente
Benjamin Mkapa, realizó su sesión inaugural en julio de 2002 con la
presencia del Sr. Wolfensohn. Los preparativos para la creación de un
CAI en Senegal antes del final del año están muy avanzados, y otros
países africanos han manifestado interés en crear sendos consejos.
Los funcionarios del FMI y el Banco Mundial planean asistir como observadores
a reuniones futuras de los CAI y brindar la ayuda y el apoyo que se
requiera. Las oficinas residentes de ambas instituciones están dispuestas
a cooperar con los grupos de trabajo de los CAI y brindarles información.
El FMI y el Banco Mundial también examinarán las solicitudes de asistencia
técnica relacionada con el trabajo de los consejos, especialmente en
el seguimiento de proyectos y el fortalecimiento de las capacidades
en sus respectivas áreas de competencia.
El Consenso de Monterrey |
La Conferencia Internacional de la ONU
sobre la Financiación para el Desarrollo marcó un hito
en la alianza para el desarrollo mundial. La conferencia,
celebrada del 18 al 22 de marzo de 2002, en Monterrey,
México, reunió a más de 50 jefes de Estado, 300 ministros,
y representantes de organismos internacionales, la sociedad
civil y las empresas, para ponerse de acuerdo sobre
una visión común de lo que se requiere para superar
la pobreza mundial.
La conferencia se ha considerado todo un éxito, y
los participantes adoptaron el Consenso de Monterrey,
un plan de desarrollo sostenible que define las prioridades
del desarrollo y la manera de lograrlas. Si bien en
la Cumbre del Milenio, una conferencia organizada
por la ONU hace dos años, se fijaron objetivos generales
de desarrollo (como la reducción de la pobreza a la
mitad y la universalización de la educación primaria
para 2015), el Consenso de Monterrey se centra en
la mejor manera de financiar el plan de trabajo.
Se pide una alianza entre los países desarrollados
y en desarrollo basada en un compromiso mutuo y verificable
de fomentar el crecimiento y reducir la pobreza. Los
países en desarrollo deben tomar la iniciativa para
mejorar la gobernanza, aplicar medidas acertadas,
fortalecer los sistemas financieros internos, invertir
en infraestructura económica y social y ofrecer un
clima transparente y estable para la inversión. Los
países desarrollados, por su parte, deben igualar
estos esfuerzos dando un gran impulso a la ayuda;
reduciendo las barreras al libre comercio; otorgando
medidas de alivio de la deuda, como la plena aplicación
de la Iniciativa reforzada para los países pobres
muy endeudados, y ayudando a los países a desarrollar
sus capacidades institucionales y su capital humano.
Al FMI y otras instituciones financieras internacionales
les corresponde una función coordinadora y reguladora
de la alianza, propiciar también el uso más eficiente
de la ayuda para el desarrollo y ofrecer la asistencia
técnica vital para el desarrollo de las capacidades.
El siguiente paso es obtener respaldo para el Consenso
de Monterrey en los países que lo han adoptado, a
fin de pasar de la visión abstracta a los hechos concretos.
Los documentos de estrategia de lucha contra la pobreza
serán importantes en este proceso (véase
"Reducción de la pobreza"), ayudando
a los países a formular políticas con las que se identifiquen
y congruentes con los objetivos de la reforma, pero
aunque el Consenso de Monterrey prepara el camino
para el trabajo futuro, faltan por definir algunos
detalles: uno de ellos es la forma de evaluar el avance
en el logro de las metas del desarrollo, o incluso
cómo se debe definir el progreso. El diálogo continúa
a la luz de estos interrogantes.
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Estrategia ante la deuda
Los países pobres buscan reducir la deuda, luchar
contra la pobreza y alcanzar el crecimiento
El FMI presta una ayuda importante a los países para hacer frente al
problema de la deuda externa brin- dándoles asesoramiento de política
y respaldo financiero. El objetivo final es velar por que los países
deudores logren un crecimiento sostenible y la viabilidad de la balanza
de pagos, y establezcan relaciones normales con sus acreedores, incluido
el acceso a los mercados financieros internacionales. Aunque los instrumentos
que utiliza han ido evolucionando, la estrategia del FMI con respecto
a la deuda sigue basándose en:
- Promover un ajuste orientado hacia el crecimiento y reformas estructurales
en los países deudores.
- Mantener un entorno económico favorable a escala mundial.
- Obtener respaldo financiero adecuado de fuentes oficiales (bilaterales
y multilaterales) y privadas.
Club de París
Los países deudores que solicitan reprogramar su deuda bilateral oficial
acuden normalmente al Club de París, que es un grupo informal de gobiernos
acreedores, principalmente de la OCDE. En virtud de estos acuerdos,
los países deudores generalmente reprograman sus pagos atrasados y los
vencimientos corrientes del servicio de la deuda admisible, con plazos
de rembolso a muchos años. Para garantizar que el alivio contribuya
a restablecer la viabilidad de la balanza de pagos y alcanzar un crecimiento
económico sostenible, el Club de París vincula el alivio de la deuda
a la formulación de un programa económico respaldado por el FMI. Además,
al determinar la cobertura y las condiciones de los acuerdos de reprogramación,
los acreedores del Club de París se basan en el análisis y la evaluación
que hace el FMI de la balanza de pagos y la deuda de los países.
En las últimas dos décadas, los acuerdos de reprogramación han ayudado
a algunos países de ingreso mediano en situación crítica a recuperar
la estabilidad financiera. En el caso de los países de bajo ingreso,
a fines de los años ochenta el Club de París comenzó no sólo a reprogramar
sino también a reducir sus deudas.
New approach needed
e necesita un nuevo enfoque Si bien con el correr del tiempo las condiciones
del Club de París se hicieron más concesionarias a fin de brindar un
alivio más duradero, muchos países pobres no crecieron con la rapidez
prevista, y el nivel de su deuda siguió siendo alto. Los acreedores,
entonces, reconocieron la necesidad de adoptar un nuevo enfoque para
estos países.
La Iniciativa para los países pobres muy endeudados (PPME), que se
creó en 1996, reunía por primera vez a acreedores multilaterales, el
Club de París y otros acreedores oficiales bilaterales y multilaterales
en un esfuerzo por reducir la deuda externa de los países pobres más
endeudados del mundo a “niveles sostenibles”, es decir, niveles que
les permitan atender el servicio de la deuda con los ingresos de la
exportación, la ayuda y la afluencia de capital sin comprometer el crecimiento
económico a largo plazo orientado a reducir la pobreza. Esta asistencia
excepcional supone una reducción del valor neto actualizado (véase
recuadro) de la deuda externa pública que le permitirá al país liberar
recursos para reducir la pobreza y acelerar el crecimiento.
La asistencia en virtud de la Iniciativa se limita a los países cuyos
ingresos per cápita bajos los habilitan para los servicios de préstamo
concesionarios del Banco Mundial y el FMI, y cuya carga de la deuda
no es viable ni siquiera con el alivio tradicional (véase
recuadro). La gran mayoría de los países habilitados se encuentra
en África.
Modificación de la Iniciativa
Tras la revisión y amplias consultas públicas sobre la Iniciativa PPME,
en 1999 se aprobaron cambios a fin de ofrecer un alivio de la deuda
más amplio, profundo y acelerado y fortalecer los vínculos entre el
alivio de la deuda, la reducción de la pobreza y las políticas sociales.
Valor neto actualizado de la
deuda |
El valor nominal de la deuda externa
no es una buena medida de la carga de la deuda de
un país cuando una parte importante de ella se ha
contraído en condiciones concesionarias a una tasa
de interés inferior a la del mercado. El valor neto
actualizado de la deuda tiene en cuenta el grado de
concesionalidad y se define como la suma de todas
las obligaciones futuras (interés y principal) correspondientes
al servicio de la deuda actual, descontadas a la tasa
de interés del mercado. Cuando la tasa de interés
del préstamo es inferior a la tasa del mercado, el
valor neto actualizado será inferior al nominal, y
esta diferencia representa el factor de donación.
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Pero la Iniciativa reforzada para los PPME no es
una panacea. El alivio de la deuda, no importa cuán generoso sea, es
sólo el primer paso hacia la recuperación económica de estos países.
La viabilidad de la deuda a largo plazo sólo se logrará si primero se
atienden directamente los factores que originan el problema. Para no
regresar a una situación en la que se sacrifican inversiones que ayudan
a reducir la pobreza por estar rembolsando una deuda cada vez mayor,
los países deben utilizar el producto del alivio para sentar las bases
de un crecimiento y una reducción de la pobreza sostenidos.
¿Qué ha logrado la Iniciativa PPME?
Al mes de julio de 2002, 26 países habían alcanzado el punto de decisión
de la Iniciativa reforzada para los PPME, comprometiéndose más de US$40.000
millones (en cifras nominales) para alivio de la deuda. Esta Iniciativa,
junto con otros alivios, reducirá en unos dos tercios el valor neto
actualizado de su deuda externa (de US$62.000 millones a US$22.000 millones).
Los recursos se asignarán a educación, salud (incluidos la prevención
y el tratamiento del VIH/SIDA), desarrollo rural y abastecimiento de
agua, e infraestructura vial. Seis países—Bolivia, Burkina Faso,
Mauritania, Mozambique, Tanzanía y Uganda—han recibido incondicionalmente
todo el alivio de la deuda contemplado en la Iniciativa. Se ha considerado
otorgar alivio con carácter provisional a otros dos países, Côte d’Ivoire
y la República Democrática del Congo, que se espera que alcancen pronto
el punto de decisión.
Retos futuros
El primer reto es lograr que más PPME alcancen el punto de decisión.
Esto es particularmente difícil porque muchos de los países que aún
no han reunido los requisitos para el alivio están sumidos en conflictos
armados internos o internacionales, o acaban de salir de ellos. Su necesidad
de alivio de la deuda es muy aguda porque padecen una extrema pobreza
y deben iniciar enormes tareas de reconstrucción. Muchos también sufren
de graves problemas de gobernanza. Estos países necesitan ayuda para
generar un historial de buenas políticas económicas que les permita
alcanzar el punto de decisión y comenzar a recibir alivio de la deuda.
La segunda tarea es lograr que los países que ya llegaron al punto de
decisión pongan en práctica políticas vigorosas de reducción de la pobreza
para poder llegar al punto de culminación y alcanzar un crecimiento
sostenible.
Cómo funciona la Iniciativa para
los PPME |
Para poder recibir la asistencia, el
PPME debe aplicar firmes políticas económicas respaldadas
por el FMI y el Banco Mundial. Los esfuerzos del país
se complementan con la ayuda concesionaria de los donantes
e instituciones pertinentes y el alivio tradicional
de la deuda que otorgan los acreedores bilaterales (incluido
el Club de París).
En esta fase se analiza detalladamente la situación
de deuda externa del país. Si su coeficiente de deuda
externa, tras un alivio tradicional total de la deuda,
supera el 150% del valor neto actualizado de la deuda/exportación
(o, en el caso de una pequeña economía abierta, el
250% del ingreso fiscal), puede recibir asistencia
en el marco de la Iniciativa. En el punto de decisión,
el FMI y el Banco Mundial deciden oficialmente la
habilitación del país, y la comunidad internacional
se compromete a reducir la deuda del país hasta un
nivel viable.
Una vez habilitado para recibir el alivio, el PPME
debe mantener un buen historial con el respaldo de
la comunidad internacional, aplicando satisfactoriamente
reformas estructurales clave, conservando la estabilidad
macroeconómica e implementando una estrategia de reducción
de la pobreza( véase "Reducción de la
pobreza"). Los acreedores bilaterales del Club
de París reprograman los vencimientos, con una rebaja
de hasta el 90% del VNA, y se prevé que otros acreedores
bilaterales y comerciales hagan otro tanto. El FMI,
el Banco Mundial y algunos acreedores multilaterales
ofrecen un alivio provisional entre el punto de decisión
y el de culminación.
Los países alcanzan el punto de culminación cuando
cumplen los objetivos fijados en el punto de decisión
y pueden entonces recibir el saldo del alivio de la
deuda comprometido. Ello significa que todos los acreedores
deben reducir el valor neto actualizado de sus créditos
al país hasta el nivel viable convenido.
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¿Por qué no simplemente condonar toda la deuda?
Se han hecho varios llamados a la comunidad internacional para que sencillamente
se elimine toda la deuda de los países más pobres del mundo, pero se
determinó que esa medida no sería la más eficaz ni equitativa para combatir
la pobreza con los limitados recursos disponibles. Hoy en día, el desafío
más grande para el desarrollo—la reducción de la pobreza en el
mundo—exige una estrategia integral que reúna los esfuerzos de los países
más pobres para ayudarse a sí mismos, mayor asistencia financiera de
la comunidad internacional y mayor acceso a los mercados de los países
industriales. El alivio en el marco de la Iniciativa PPME es sólo uno
de los elementos del respaldo internacional a los países pobres que
elimina deuda como obstáculo al crecimiento. Durante muchos años, estos
países seguirán necesitando un respaldo financiero en condiciones concesionarias
que les ayude a implementar sus estrategias de crecimiento y luchar
por sí mismos contra la pobreza.
La condonación total de la deuda socavaría los fondos de que disponen
los acreedores multilaterales para otorgar préstamos a otros países
en desarrollo, algunos igualmente pobres pero con una deuda externa
menor. Más del 80% de los pobres del mundo viven en países que no son
PPME. Una condonación total de la deuda agotaría los recursos que financian
el servicio para el crecimiento y la lucha contra la pobreza (SCLP)
y la Iniciativa PPME, y el FMI tendría que cesar de proporcionar respaldo
concesionario a sus miembros más pobres.
Reducción de la pobreza
Respaldo a los planes impulsados por los países
En 1999, el reemplazo del servicio reforzado de ajuste estructural
(SRAE) del FMI por el servicio para el crecimiento y la lucha contra
la pobreza (SCLP), también concesionario pero mejor focalizado, alentó
las expectativas en torno a la función del FMI en la lucha contra la
pobreza. Los préstamos del SCLP—como los del SRAE—tienen tasas
de interés muy bajas, largos plazos de rembolso y un período de gracia.
A diferencia del SRAE, el SCLP se basa más directamente en la relación,
entre la estabilidad macroeconómica, la reforma estructural y la reducción
de la pobreza. Sin embargo, esta atención a la pobreza no es del todo
nueva: desde fines de los años ochenta, el asesoramiento del FMI a los
países miembros ha hecho cada vez más hincapié en las políticas favorables
a los pobres, sin olvidar que la estabilización macroeconómica—sobre
todo de los precios—también puede beneficiarlos.
Los recursos del SCLP han tenido gran demanda. En los últimos años,
más de 40 países suscribieron acuerdos en el marco del SCLP o modificaron
los acuerdos del SRAE a fin de incluir las nuevas características del
SCLP. En 2001, el FMI comprometió un total de US$2.700 millones en préstamos
del SCLP, un aumento récord frente a US$1.000 millones en 2000, que
obedeció en parte a la aprobación de unos cuantiosos compromisos. Las
proyecciones actuales indican que los nuevos compromisos podrían llegar
a US$2.000 millones en 2002. Si el alto nivel de los nuevos compromisos
continúa, habrá que estudiar la necesidad de movilizar nuevos recursos
del SCLP y de subvención.
Los países pobres que deseen recibir asistencia en el marco de la Iniciativa
PPME, o préstamos de bajo costo del FMI o del Banco Mundial, deben preparar
una estrategia integral de reducción de la pobreza. Estas estrategias—formuladas
por el gobierno con una amplia participación, incluidos la sociedad
civil, donantes y organismos internacionales, y detalladas en un documento
de estrategia de lucha contra la pobreza (DELP)—ahora constituyen
la base para el crédito concesionario de las dos instituciones.
Los países no tienen que seguir ningún modelo para elaborar la estrategia
de lucha contra la pobreza, sino que cada una debe basarse en sus circunstancias
particulares; pero el DELP debe describir las principales características
de la pobreza y definir las estrategias a mediano y largo plazo que
produzcan el mayor efecto de reducción de la misma y definir también
metas realistas y verificables de reducción de la pobreza junto con
las políticas macroeconómicas, estructurales y sociales para lograr
esas metas.
Los DELP de creación local deberán generar nuevas ideas sobre la forma
de alcanzar las metas comunes de crecimiento y reducción de la pobreza
y ayudar a desarrollar un sentido de identificación y compromiso del
país con esos objetivos. El FMI y el Banco Mundial participan en ese
proceso y, junto con otros donantes multilaterales y bilaterales, ofrecen
asesoramiento y conocimientos técnicos, pero la estrategia y las políticas
deben surgir de debates nacionales en los que se tenga en cuenta, sobre
todo, el sentir de los sectores pobres.
Evaluación de los DELP y el SCLP
Si bien la aplicación del proceso de los DELP y el SCLP se halla en
sus etapas iniciales, no es demasiado pronto para evaluar las lecciones
aprendidas hasta el momento. Recientemente, el FMI y el Banco Mundial
evaluaron conjuntamente los resultados del DELP en sus dos primeros
años, y el FMI evaluó los del SCLP. Los exámenes se basaron en evaluaciones
internas y amplias consultas externas con quienes conocen directamente
el proceso de los DELP y los programas respaldados por el SCLP: gobiernos
participantes, organismos internacionales, agencias de ayuda y órganos
de la sociedad civil en todo el mundo, que suministraron evaluaciones
por escrito y expresaron sus opiniones en foros regionales y en la Conferencia
Internacional sobre Estrategias Nacionales de Lucha contra la Pobreza
organizada por el FMI y el Banco Mundial en Washington en enero de 2002.
Revisión del proceso de los DELP
En vista de que sólo se habían presentado diez DELP definitivos, el
examen se centró principalmente en su proceso y posible evaluación del
contenido. Si bien los países están elaborando sus DELP definitivos
con una lentitud mayor que la prevista, hay suficiente información para
empezar a definir las “buenas prácticas”. En una segunda revisión, prevista
para 2005, se podrá evaluar mejor el avance, incluido el impacto sobre
las cifras e indicadores de pobreza.
¿Cuáles fueron las principales conclusiones? La principal es que el
enfoque de los DELP cuenta con amplio respaldo y en general se acepta
que sus objetivos siguen siendo válidos. La mayoría de los donantes
han indicado que van a alinear sus programas de asistencia con los DELP,
pero que se requieren mejores prácticas, sobre todo para rebajar el
costo de movilizar y utilizar ayuda para los países de bajo ingreso.
Cabe notar que el proceso de los DELP está ocupando un lugar más destacado
en los debates sobre la reducción de la pobreza. La recopilación, el
análisis y el seguimiento de datos se están haciendo más sistemáticos.
Hay un creciente sentido de identificación de los países con los programas
y un diálogo más abierto dentro y entre los gobiernos y los grupos de
la sociedad civil, incluso en países que carecen de una larga tradición
de consulta. No obstante, todavía queda mucho por hacer, siendo la principal
tarea el fomento de una mayor y más significativa participación de los
actores nacionales. La calidad de la participación ha variado mucho
de un país a otro. A menudo el debate se ha limitado a aspectos de los
programas de reducción de la pobreza, lo que en la práctica ha excluido
a las organizaciones de la sociedad civil del debate más general sobre
las reformas estructurales y las políticas macroeconómicas. El examen
recomendó que los socios en el desarrollo presten más asistencia técnica
para que la sociedad civil pueda participar más plena y eficazmente
en el proceso, y se reconoció la necesidad de incluir a los parlamentarios
en la preparación, aprobación y seguimiento de las estrategias nacionales.
El FMI amplía la lucha contra la pobreza
en la antigua Unión Soviética |
Tras la disolución de la Unión Soviética
hace poco más de una década, los siete países miembros
de ingreso más bajo de la Comunidad de Estados Independientes
(CEI) (Armenia, Azerbaiyán, Georgia, Moldova, la República
Kirguisa, Tayikistán y Uzbekistán) tuvieron que acometer
la doble tarea de construir un Estado y una economía
de mercado. La mayoría de estos países han avanzado
considerablemente en el logro de estas metas en el
último decenio pero la complejidad de la transición
ha reducido acusadamente los niveles de vida y, en
ciertos casos, ha hecho muy difícil la eficaz aplicación
de reformas de mercado.
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La Iniciativa CEI-7 tiene por
objeto mejorar las condiciones de vida en la antigua
Unión Soviética. A la derecha, mercado agrícola
de Moldova, uno de los países beneficiarios. |
El FMI—junto con el Banco Mundial,
el Banco Asiático de Desarrollo, el Banco Europeo
de Reconstrucción y Desarrollo, donantes bilaterales
y países vecinos—creó recientemente la Iniciativa
CEI-7 con el fin expreso de ayudar a reducir la pobreza
y fomentar el crecimiento económico en estos siete
países. Con casi 20 millones de personas viviendo
en una situación de extrema pobreza, es evidente que
a estos países les queda camino por recorrer para
superar las perturbaciones económicas y sociales que
trajo consigo la transición de una economía planificada
a un sistema de mercado.
Si bien cada país tiene sus propios
problemas de ajuste, el FMI y las demás instituciones
financieras internacionales que patrocinan la Iniciativa
CEI-7 han identificado algunos que son comunes a todos
ellos de cara al desarrollo. En cuanto a las reformas
políticas, debe reforzarse la capacidad del Estado
para frenar la corrupción y brindar servicios públicos
con mayor eficacia y responsabilidad. En todos estos
países se deben prestar servicios más adecuados de
salud y educación a la población y se deben tomar
medidas para luchar contra enfermedades devastadoras
como el VIH/SIDA, la tuberculosis y la malaria. Una
mayor estabilidad macroeconómica es clave para crear
un clima que permita a las empresas locales planificar,
invertir y crecer, y ayude a atraer flujos de capital
y tecnología a través de la inversión extranjera directa
para aumentar la productividad y desarrollar un sector
privado dinámico. El aumento de la cooperación regional
(por ejemplo, en materia de comercio y la energía)
es vital para incrementar la competitividad de las
economías nacionales y puede ayudar a resolver problemas
regionales y a dividir el costo de las grandes inversiones
en infraestructura. Por último, es urgente reducir
la deuda a niveles viables.
Estos siete países habrán de tomar
la iniciativa para avanzar en estas áreas redoblando
los esfuerzos en pro del desarrollo y la reforma,
pero sus socios comerciales y los organismos de desarrollo,
así como los acreedores, deberán complementar esta
labor con un fuerte apoyo para reforzar las bases
del crecimiento y reducir la pobreza. Se prevé que
la asistencia incluya préstamos a bajo costo, alivio
o reestructuración de la deuda (en caso necesario),
así como un mayor acceso a los mercados de los países
industriales y el fomento de la inversión directa.
Los organismos de desarrollo tienen previsto coordinar
mejor la administración del apoyo a la Iniciativa
CEI-7, cerciorándose de que dicho apoyo se vincule
a programas de reducción de la pobreza impulsados
por los propios países. Las instituciones internacionales
y regionales se proponen ofrecer también asistencia
técnica y asesoramiento en materia de políticas.
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En el futuro, habrá que prestar más atención a la aplicación de los
DELP y comprender mejor la relación entre las medidas de política y
los resultados obtenidos en la reducción de la pobreza. Según el examen,
los mejores resultados se podrían obtener en las siguientes áreas:
- Marco macroeconómico. El DELP de cada país se basa en un
marco macroeconómico que sustenta sus objetivos de crecimiento y reducción
de la pobreza, pero se requieren metas de crecimiento más realistas
y acordes con las circunstancias y limitaciones de los países, y se
deben identificar más cuidadosamente las fuentes de crecimiento favorables
a los pobres que sustentan esas metas. Los países pobres también deben
prestar más atención a su alta vulnerabilidad a las perturbaciones
externas, identificando por adelantado las áreas vulnerables y las
redes de protección social u otras medidas pertinentes.
- Definición de prioridades de política. Hay que definir mejor
las prioridades y sacrificios en las medidas de política para que
las estrategias de reducción de la pobreza se ajusten a las realidades
presupuestarias, sobre todo en épocas de austeridad. La incertidumbre
en torno a las estrategias generales de crecimiento, sus costos y
los recursos disponibles suelen dificultar la definición de prioridades
del DELP. Los socios en el desarrollo deben prestar más asistencia
técnica y financiera a fin de ayudar a los países a definir prioridades.
- Análisis del efecto en la pobreza y la situación social.
Las limitaciones de la capacidad nacional y las dificultades técnicas
pueden mermar la posibilidad de observar la relación entre las medidas
de política y el diagnóstico integral de la pobreza o el análisis
de sus efectos sobre ella. Los países, con la ayuda de los socios
en el desarrollo, deben efectuar análisis más sistemáticos del efecto
en la pobreza y la situación social de las grandes reformas de política.
- Sistemas de gestión del gasto público. Los países deben evaluar
el estado actual de estos sistemas—que a menudo sufren problemas como
una cobertura incompleta, clasificación incorrecta, poca capacidad
de seguimiento del gasto y auditoría deficiente— y formular planes
realistas para mejorarlos, solicitando apoyo técnico de ser necesario.
Examen del SCLP
I¿Sastisface el SCLP las expectativas? El FMI efectuó un gran examen
entre julio de 2001 y febrero de 2002 para determinar el grado en que
se había mejorado la identificación de los países con los programas,
y si los programas del SCLP se guiaban por las estrategias nacionales
de reducción de la pobreza. Puesto que el SCLP sólo tiene unos pocos
años de creado y los acuerdos duran tres años, la revisión debió limitarse
principalmente al diseño de los programas. Para determinar si los programas
respaldados por el SCLP están cumpliendo las metas de reducción de la
pobreza o de crecimiento habrá que esperar a la revisión programada
para 2005. En la revisión reciente se concluyó, entre otras cosas, que:
- La composición del gasto público presupuestado y ejecutado se está
orientando más hacia los pobres y hacia el crecimiento en los países
que aplican esos programas. Los países están asignando una mayor proporción
del gasto público a la educación y salud, y los programas del SCLP
están procurando mejorar la eficiencia del gasto en esas áreas.
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Los agricultores de Camboya, uno de los países
habilitados para el SCLP, están sufriendo la peor sequía de los
últimos años. |
- Los programas respaldados por el SCLP se caracterizan por una flexibilidad
fiscal (el marco fiscal permite incrementar el gasto en la reducción
de la pobreza cuando se dispone de recursos adicionales) mayor que
la de programas previos del SRAE. Los programas del SCLP tienen como
meta un gasto público no correspondiente a intereses que supera en
una media de 2 puntos porcentuales del PIB a los anteriores programas
del SRAE. Los programas del SCLP también ofrecen mayor flexibilidad
para elevar el gasto ante un financiamiento externo (incluidas donaciones)
mayor de lo previsto, o permiten un mayor financiamiento interno para
compensar déficit de financiamiento externo.
- Casi todos los programas respaldados por el SCLP hacen hincapié
en la mejora de la gestión del gasto público. La mayoría de las medidas
se centran en el control del gasto, sobre todo en no exceder los límites
presupuestados. Otras procuran reforzar procedimientos de auditoría
o estrategias de lucha contra la corrupción.
- Unos tres quintos de las autoridades nacionales opinaron en la encuesta
que el SCLP ofrecía más oportunidades que antes para influir en el
diseño de los programas, y que los funcionarios del FMI en la sede
y los representantes residentes participan cada vez más en el diálogo
nacional relacionado con el SCLP.
- En estos programas se ha simplificado bastante la condicionalidad,
a tenor de una racionalización general de la condicionalidad estructural
de los acuerdos del FMI. En la revisión se observó en los acuerdos
del SCLP, un mayor uso de criterios de ejecución, medidas previas
y parámetros estructurales, que en los del SRAE para los mismos países.
Si bien se concluyó que los programas respaldados por el SCLP tuvieron
un comienzo promisorio, existen posibilidades de aplicar prácticas óptimas
más sistemáticamente:
- Se requiere un examen más sistemático de los marcos y políticas
macroeconómicos, incluidas las fuentes de crecimiento, otras opciones
de política así como las limitaciones y las distintas alternativas.
- El FMI y el Banco Mundial deben seguir avanzando en la diferenciación
de sus funciones y la coordinación de sus actividades. Los documentos
del FMI y las evaluaciones conjuntas deben indicar mejor las condiciones
exigidas por otros donantes para dar una idea más completa de la condicionalidad
total.
- Hay que adoptar más medidas en materia de gasto público, entre otras
la mejora de la calidad y eficiencia del gasto y el refuerzo de los
sistemas de gestión del mismo.
- La documentación debe indicar claramente la función del SCLP en
la estrategia global del país de lucha contra la pobreza así como
las opciones consideradas y los compromisos asumidos por el gobierno.
Además del diseño de los programas respaldados por el SCLP, se planteó
la necesidad de efectuar otras reformas, entre ellas:
- Más atención a las fuentes de crecimiento en los programas respaldados
por el SCLP.
- Comunicación más estrecha y eficaz con los funcionarios públicos,
los socios en el desarrollo y la sociedad civil de los países sobre
las opciones de política para los programas del SCLP.
- Documentos del SCLP que normalmente describan el análisis del efecto
en la pobreza y la situación social, así como deliberaciones con las
autoridades sobre el impacto social de las reformas clave.
- Mayor fortalecimiento de las capacidades para formular y evaluar
marcos macroeconómicos, analizar perfiles de pobreza y realizar análisis
del efecto en la pobreza y la situación social.
- Un examen de la estructura del SCLP y su idoneidad para satisfacer
las diversas ecesidades de los países de bajo ingreso.
Dimensiones sociales del financiamiento
del FMI |
Cumpliendo su mandato de fomentar
la cooperación monetaria internacional, el crecimiento
equilibrado del comercio internacional y la estabilidad
cambiaria, el FMI contribuye al desarrollo económico
y humano sostenibles, y reconoce que, para tener éxito,
todo programa macroeconómico debe incluir también
medidas que aborden los problemas sociales y la pobreza.
Para apoyar estos objetivos, los programas respaldados
por el FMI deben incluir el gasto en el sector social
a fin de mejorar la educación y salud de los pobres.
El FMI presta atención a las políticas
sociales porque reconoce que los países se deben identificar
con los programas para que éstos tengan éxito, y que
la buena salud y la educación contribuyen, al crecimiento
y la reducción de la pobreza.
Para ello, el FMI colabora ampliamente
con otras instituciones, como los bancos regionales
de desarrollo, el Programa de las Naciones Unidas
para el Desarrollo, la Organización Internacional
del Trabajo, la Organización Mundial de la Salud y,
especialmente, el Banco Mundial. Aprovechando la experiencia
de estas entidades, el FMI asesora a los países para
instrumentar y financiar programas sociales y sectoriales
de reducción de la pobreza en un marco macroeconómico
propicio para el crecimiento. Se identifican así los
gastos improductivos que deberían reducirse a fin
de liberar recursos para la atención básica de salud
y la educación primaria y los rubros clave del gasto
público que deben mantenerse o incrementarse. Mediante
contactos con las autoridades y asistencia técnica,
el FMI también ayuda a mejorar la transparencia en
la toma de decisiones y la capacidad de los gobiernos
para vigilar el gasto destinado a reducir la pobreza
y la evolución de los indicadores sociales.
Análisis del impacto social
El FMI está decidido a incluir el análisis del impacto
en la situación social y en la pobreza en los programas
respaldados por el SCLP para evaluar las consecuencias
de medidas de política clave sobre el bienestar de
diferentes grupos sociales, sobre todo los más vulnerables
y pobres.
Cuando el análisis indique que cierta
medida (por ejemplo, una devaluación de la moneda)
podría perjudicar a los pobres, se abordarían estos
efectos a través de la selección de las políticas
o el momento de aplicarlas, medidas compensatorias
o redes de protección social. En los programas respaldados
por el FMI se han incluido redes de protección en
forma de subvenciones o pagos en efectivo a ciertos
grupos vulnerables, mejor distribución de productos
esenciales (como los medicamentos) y control temporal
de los precios de otros, indemnizaciones por despido
y readiestramiento para empleados del sector público
que han sido despedidos, y empleo en programas de
obras públicas.
En los países que puedan hacerlo,
el análisis del impacto social debería realizarse
al tomar decisiones de política en la elaboración
de los documentos de estrategia de lucha contra la
pobreza (DELP). En el caso de los países con capacidad
nacional limitada, el FMI se basará en el análisis
del impacto social y en la pobreza realizado por el
Banco Mundial y otros organismos de desarrollo que
participan en la elaboración de los DELP.
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Arquitectura financiera
La evolución de la economía impulsa las reformas
En los años noventa el mundo aprendió—a veces duramente—gran
parte de lo que hoy sabe sobre la complejidad y el dinamismo del financiamiento
mundial. La década fue testigo del poder de los mercados para crear
y destruir riqueza. La brusquedad, velocidad y alcance de las crisis
de los noventa no tuvo precedentes, pero al final depararon dos lecciones:
las crisis deben evitarse en lo posible y resolverse rápidamente cuando
aparezcan.
Estas drásticas transformaciones de la economía mundial y las lecciones
que dejaron constituyen la base para las reformas que el FMI ha defendido
y hecho suyas en los últimos años. Las reformas han destacado la importancia
crucial de contar con más información y transparencia, han puesto de
relieve la función de las normas y códigos de aceptación internacional
para mejorar los resultados y elevar la confianza y han subrayado la
necesidad de intensificar la cooperación entre los países y organismos
internacionales y mantenerse más atentos a los factores de vulnerabilidad
que puedan desencadenar crisis.
Más información, por favor
Los mercados, como lo han demostrado las crisis recientes, no desean
sorpresas. La falta de información o el descubrimiento tardío de que
la información disponible era inadecuada generan inquietud e incluso
alarma. El FMI aprovechó esta lección inicial de la crisis de Asia para
instar a los países a suministrar a los mercados más información que
sea más fiable. En su lista de reformas, se destacan una serie de proyectos
de estadística:
Normas Especiales para la Divulgación de Datos (NEDD). En virtud
de las NEED, creadas en 1996, los países suscriptores (países que desean
o tienen acceso al mercado) se comprometen a cumplir determinados niveles
internacionalmente aceptados en cuanto a la cobertura, frecuencia y
puntualidad de los datos. También se comprometen a emitir calendarios
de divulgación de datos y a seguir buenas prácticas en cuanto a la calidad
e integridad de los datos. La información sobre las prácticas de divulgación
se publica en el sitio web del FMI, en la Cartelera Electrónica de Divulgación
de Datos (CEDD), que tiene enlaces a los sitios web de los suscriptores.
Sistema General de Divulgación de Datos (SGDD). El SGDD constituye
un manual práctico para los países que no tienen acceso al mercado pero
que desean mejorar la calidad de sus sistemas estadísticos. La parti-
cipación voluntaria les permite avanzar a su propio ritmo, pero ofrece
un marco detallado que fomenta el uso de principios metodológicos de
aceptación general, la adopción de prácticas de compilación rigurosas
y la mejora del profesionalismo de los sistemas nacionales. Los países
participantes publican sus planes detallados de mejora en la CEDD, lo
que permite a los observadores nacionales e internacionales evaluar
el avance.
Marco de Evaluación de la Calidad de los Datos. El éxito de
las NEDD y el SGDD, y la mayor conciencia de que las buenas estadísticas
son esenciales para la eficacia de las políticas, llevó al FMI, en consulta
con las oficinas estadísticas nacionales, otros organismos internacionales
y los usuarios de los datos, a emprender la evaluación de la calidad
de los datos. Este nuevo marco, desarrollado en 2001, ofrece los medios
para evaluar la integridad, rigor metodológico, exactitud, fiabilidad,
aplicabilidad y accesibilidad de los datos.
La revolución de la apertura |
En el intercambio de información se
han producido transformaciones radicales en la última
década. Los cambios tecnológicos han revolucionado
la rapidez y facilidad con que se comparte la información
y han democratizado la producción y el consumo de
datos. Prácticamente la persona que tenga acceso a
Internet puede ahora consultar información antes restringida
a un grupo muy especializado.
En una era en que las comunicaciones
mundiales hacen al mundo muy pequeño, la disponibilidad
de información y la voluntad de apertura son más importantes
que nunca. A mediados de los años noventa, cuando
el FMI empezó a alentar a sus países miembros a dar
más información económica y financiera, su Informe
anual, cuidadosamente revisado, contenía prácticamente
el único resumen público de las consultas anuales
(del Artículo IV) con los países miembros sobre el
estado actual y las perspectivas de sus economías.
Para el año 2000, el sitio web del
FMI (www.imf.org) ya era el principal vehículo de
lo que constituyó una transformación radical en la
apertura del FMI y sus países miembros. En este sitio
se encuentran notas de información al público que
resumen las deliberaciones del Directorio Ejecutivo
del FMI sobre los informes de las consultas del Artículo
IV con varios países miembros. El sitio se ha convertido
en un instrumento clave para que las autoridades y
el FMI publiquen los objetivos y recursos de los programas
de ajuste de los países. En la actualidad se publican
los documentos de intención de las autoridades y más
de la mitad de los informes del personal sobre el
uso de recursos del FMI.
El FMI es ahora más transparente en
torno a sus propias políticas y operaciones. Normalmente
se publican los informes del personal sobre los pros
y contras de varios temas de política y resúmenes
de los debates en el Directorio Ejecutivo. El FMI
utiliza su sitio web para iniciar un diálogo (solicitar
opiniones o comentarios sobre borradores iniciales
de un documento) sobre temas clave de amplio interés
público y lograr mayor alcance a parlamentarios, organizaciones
no gubernamentales y otros grupos de interés a fin
de mejorar la comprensión de sus políticas y operaciones
por parte del público y profundizar el diálogo con
ellos.
En 2001, el FMI también, oficialmente
adoptó medidas para dar más transparencia y eficacia
a sus políticas y procedimientos al crear la Oficina
de Evaluación Independiente (véase "Oficina
de evaluación independiente" ). La oficina,
que procura complementar las evaluaciones internas
tradicionales, elige varios temas principales anualmente
para examinarlos y publica sus resultados en Internet.
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Función de las normas y códigos
La calidad de los datos es importante, pero forma parte de un proyecto
más amplio. La aceptación y aplicación de prácticas y códigos generales
permiten medir la calidad y los resultados de las políticas, ayudan
a las autoridades nacionales a formular y evaluar las políticas y permiten
a los operadores del mercado evaluar la situación de un país. Las normas
y códigos de aceptación general también estimulan una mayor transparencia,
mejor gobernanza y mayor responsabilidad y credibilidad de las políticas.
Con la colaboración de una amplia gama de instituciones internacionales
e información de autoridades nacionales, el FMI ha elaborado normas
y códigos y ha procurado incluirlos en el examen anual (supervisión)
de la economía de los países miembros.
En 1999–2000, el FMI y el Banco Mundial iniciaron un programa de informes
sintéticos voluntarios sobre diversos temas en que los dos organismos
tienen mucha experiencia. En estos informes sobre la observancia de
los códigos y normas (IOCN), de los que se publica casi el 70%, se analizan
principalmente tres cuestiones generales: la transparencia; la regulación
y supervisión financiera, y el gobierno de las sociedades (incluidas
la contabilidad, auditoría e insolvencia). En estas áreas, los IOCN
fomentan:
- La transparencia en la formulación de las políticas y operaciones
gubernamentales. El supuesto básico es que es más probable que
un público mejor informado exija cuentas al gobierno por sus políticas,
y que los inversionistas, armados con mejores datos y normas para
evaluarlos, podrán invertir con mayor conocimiento de causa. Las herramientas
básicas son las iniciativas estadísticas del FMI (las NEDD y el SGDD)
y los códigos de transparencia de las políticas monetaria, financiera
y fiscal.
- La estabilidad del sector financiero. Como regla empírica,
la solidez y coherencia del sector financiero es proporcional a la
del marco regulatorio. El FMI y el Banco Mundial realizan cada año
varios programas de evaluación del sector financiero (PESF). En estos
análisis detallados se examina el sector financiero para identificar
los factores de vulnerabilidad, evaluar la gestión de riesgos y las
necesidades de asistencia técnica, y ayudar a los países a determinar
las medidas más urgentes. Además, los PESF evalúan la supervisión
bancaria, las normas sobre valores y seguros y los sistemas de pago,
así como la transparencia de las políticas monetaria y financiera.
- La solidez del sector empresarial. Dado que el sector privado
es el principal motor del crecimiento de la economía, la solidez de
las empresas es crucial. El Banco Mundial comúnmente asume la función
rectora en la evaluación de la gestión de las empresas, las normas
contables y de auditoría y los procedimientos en materia de insolvencia
y derechos de los acreedores.
¿Cuándo son vulnerables los países?
La información y la apertura son muy útiles para evitar perturbaciones
que susciten graves problemas, pero cuando el FMI y otras instituciones
evaluaron los daños de las crisis recientes también se planteó el interrogante
de cómo saber cuando un país está en riesgo. Las crisis de los años
noventa fueron diferentes, debido a la mayor importancia del financiamiento
privado, el contagio trasnacional y los vínculos más estrechos entre
las dificultades de financiamiento externo y las tensiones en los sectores
financiero y empresarial. Todo esto destaca la utilidad de estudiar
de nuevo y a conciencia las causas de vulnerabilidad y las técnicas
que permitan detectar problemas antes de que se conviertan en crisis.
Como primer paso, era obvio que el FMI debía vigilar más de cerca y
más continuamente la evolución de los mercados de capital, lo cual llevó
a crear el Departamento de Mercados Internacionales de Capital en 2001
a fin de complementar el trabajo tradicionalmente realizado por otros
departamentos. Como resultado, se han fortalecido las evaluaciones de
vulnerabilidad de los países, que ahora abarcan un conjunto más completo
de temas, entre los que se incluyen el efecto de los últimos cambios
del entorno económico y financiero mundial, los sistemas de indicadores
y alerta anticipada, y las conclusiones de los IOCN y el PESF, en su
caso.
Una revisión de las evaluaciones de la vulnerabilidad realizada por
el Directorio Ejecutivo del FMI también mostró la falta de información
sobre el riesgo cambiario de las empresas financieras y no financieras
y sobre las necesidades de financiamiento de los países. Esta conclusión
instó a las instituciones internacionales a transmitir a las autoridades
nacionales la urgencia de las vulnerabilidades detectadas y a seguir
trabajando en la formulación de pautas de política. En los últimos años,
se han fijado pautas detalladas sobre la gestión de la deuda pública
(en consulta con el Banco Mundial) y la gestión de las reservas internacionales
(en estrecha colaboración con los países miembros y otras instituciones
internacionales).
Fortalecimiento del sector financiero
Como lo demostró la crisis de Asia, las deficiencias financieras pueden
agravar las crisis y también causarlas. Dado que la solidez del sector
financiero resulta crucial para evitar crisis, y que su debilidad puede
avivar el fuego de una economía en peligro, el FMI ha prestado más atención
a este sector. Ha reorientado los recursos del PESF hacia las grandes
economías y los mercados emergentes clave que podrían tener un impacto
sistémico en la economía mundial y ha complementado el programa con
la formulación de indicadores de solidez financiera “básicos” y “recomendados”
que sirven para orientar los planes de supervisión de cada país e ilustrar
a las autoridades nacionales sobre las características de un sector
financiero sano. Los indicadores básicos se centran en elementos cruciales
del sistema bancario, mientras que los recomendados analizan más detalladamente
el sector bancario y ciertos aspectos de los sectores financiero no
bancario, empresarial e inmobiliario y del sector de hogares.
Evaluación de los centros financieros extraterritoriales
Tradicionalmente, las finanzas mundiales eran una suma de las finanzas
nacionales, pero la proliferación de centros financieros extraterritoriales
y el gran volumen de fondos canalizados a través de ellos han añadido
una nueva dimensión, y nivel de complejidad, a las finanzas mundiales.
Ante los crecientes pedidos de información sobre estas actividades,
el FMI ha ayudado a los centros a reunir datos y a autoevaluarse, prestando
asistencia técnica en caso necesario.
Lavado de dinero y financiamiento del terrorismo
El lavado de dinero, y su nueva relación con el terrorismo, afecta a
los centros financieros nacionales y extraterritoriales. El trabajo
del FMI en esta materia se inició ante los abusos financieros que amenazaban
la integridad y estabilidad del sistema financiero internacional. Los
hechos del 11 de septiembre dieron un nuevo alcance y sentido de urgencia
al trabajo y aceleraron los planes de coordinación de las tareas de
los organismos internacionales en la aplicación de las recomendaciones
del Grupo de Acción Financiera sobre el Blanqueo de Capitales (GAFI).
El FMI, que se especializa en la evaluación económica y en ayudar a
los países miembros a mejorar la calidad y eficacia de la supervisión
y reglamentación de sus instituciones financieras, ha centrado sus esfuerzos
en los principios de supervisión pertinentes, la colaboración con los
principales grupos de lucha contra el lavado de dinero, la asistencia
técnica y la atención al problema en sus tareas de supervisión y de
otro tipo.
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Concretamente, los funcionarios del Banco Mundial y el FMI han elaborado
una metodología para evaluar si los controles y procedimientos para
evitar abusos son adecuados, que se está poniendo a prueba como parte
de la evaluación del sector financiero que realizan ambas instituciones.
Sus Directorios debatirán si deben añadir las 40+8 Recomendaciones del
GAFI a la lista de normas que incluye la elaboración de un IOCN sobre
la lucha contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo,
y la forma en que podrían llevarse a cabo esas evaluaciones. El FMI
y el Banco Mundial también están trabajando estrechamente con el GAFI
para adaptar las recomendaciones de este grupo sobre el lavado de dinero
al trabajo que se realiza en el marco de los IOCN.
Cuándo se debe liberalizar la cuenta de capital
Para el FMI es importante saber cuándo y cómo deben las economías de
mercados emergentes liberalizar su cuenta de capital. El acceso a los
mercados de capital ofrece oportunidades para financiar las inversiones
esenciales para el crecimiento, pero las crisis de la última década
también recuerdan los peligros de la transición y la magnitud de los
riesgos.
¿Cómo pueden los países preparar el terreno para la apertura de la
cuenta de capital y aplicar las reformas en una secuencia que refuerce
la estabilidad y minimice la volatilidad?
El FMI, en el curso de sus consultas anuales, ha ayudado a los países
miembros a evaluar su grado de preparación para liberalizar la cuenta
de capital y a establecer el orden de prioridad de las reformas del
sector financiero, subrayando la importancia de la transparencia. Si
bien no existen recetas infalibles para la liberalización, lo ocurrido
en muchos países parece indicar que sería más seguro liberalizar primero
los flujos a más largo plazo (sobre todo la inversión extranjera directa)
en vez de los flujos a corto plazo, que son más volátiles.
Resolución de las crisis
Siempre habrá crisis por más que se tomen medidas preventivas. El FMI
aspira a reducir el número y la gravedad de las crisis y ayudar a los
países a afrontarlas con decisión y eficacia cuando aparezcan. En abril,
el Director Gerente del FMI, Horst Köhler, presentó un programa de cuatro
puntos para fortalecer el marco de resolución de las crisis: mayor capacidad
para evaluar la viabilidad de la deuda de un país; una política clara
de acceso a los recursos del FMI en caso de crisis de la cuenta de capital;
mejores medios para lograr la participación del sector privado en la
resolución de las crisis financieras, y elaboración de un marco jurídico
más ordenado y transparente para reestructurar la deuda soberana.
Información pública sobre las
finanzas del FMI |
En los últimos años, el FMI ha ampliado
considerablemente el volumen, calidad y oportunidad
de la información que publica sobre sus finanzas.
En el ejercicio 2002, se publicó la nueva edición
de un folleto que ofrece información detallada sobre
la estructura financiera del FMI (Organización
y operaciones financieras del FMI, Serie de folletos,
No. 45, sexta edición, 2001). El FMI también publica
en Internet (http://0-www-imf-org.library.svsu.edu/external/fin.htm)
datos básicos y actualizados sobre sus actividades
financieras, entre ellas:
- Situación financiera actual.
- Liquidez y fuentes de financiamiento
del FMI.
- Valoración y tasa de interés del
DEG.
- Tasas de cargo de los préstamos
del FMI y tasas de
- Información sobre los países:
- Acuerdos de préstamo vigentes.
- Desembolsos de préstamos y
créditos pendientes de rembolso.
- Rembolsos de préstamos y proyecciones
de obligaciones.
- Atrasos.
- Asignaciones y tenencias de
DEG.
- Estados financieros.
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Viabilidad de la deuda. La capacidad para
distinguir entre los tipos y grados de crisis de la deuda es clave para
responder adecuadamente. Para brindar una asistencia eficaz, el FMI
debe poder diferenciar entre los casos en que se requiere una reestructuración
y un fuerte castigo contable de las deudas; aquellos casos en que el
sector oficial debe alentar a los acreedores a llegar a un acuerdo voluntario;
y los casos en que resulte indicado que el FMI y otras instituciones
otorguen financiamiento en apoyo al programa de ajuste del país y ayuden
a restaurar la confianza y a estimular la reanudación de la afluencia
de capital privado. .
¿Cuándo es viable la deuda? No es fácil dar una respuesta rápida y
contundente, pero el FMI trabaja para reforzar las técnicas analíticas
en que se basan sus opiniones. Se estudiarán más detalladamente los
elementos de estas decisiones y se someterán a prueba los supuestos
básicos sobre el aumento de las utilidades, las tasas de interés y la
balanza primaria de ingresos y egresos.
Acceso a los recursos del FMI. En los países miembros que sufren
crisis de la cuenta de capital suele haber una amplia brecha entre las
necesidades inmediatas de financiamiento y los recursos del FMI que
normalmente tendrían a su disposición (en función de sus cuotas). Una
política más clara de límites de acceso permitiría al FMI prestar el
nivel de financiamiento requerido y reforzar los incentivos para que
se apliquen políticas responsables y se evalúe el riesgo con prudencia.
Refuerzo de los mecanismos de participación del sector privado.
Dentro del marco jurídico actual, ¿cómo puede el sector privado
desempeñar una función más importante en la resolución de las crisis
financieras? Los mecanismos alternativos de financiamiento pueden ayudar
a manejar las crisis, pero los estudios del FMI indican que deben analizarse
con cuidado las circunstancias particulares y evaluarse los beneficios
frente a los posibles riesgos, incluidos la inestabilidad de los mercados
y el traslado del riesgo soberano al sistema financiero interno. Cuando
haga falta una reestructuración de la deuda soberana, será crucial frenar
la pérdida de confianza y mantener el orden.
Reestructuraciones soberanas. Se hacen necesarias cuando la
carga de la deuda de un país se torna insostenible. Son raras, pero
excepcionalmente onerosas, porque no existe un marco legal para manejar
este proceso de manera oportuna, previsible y ordenada.
En noviembre de 2001, la Primera Subdirectora Gerente del FMI, Anne
Krueger, reanudó el debate sobre la forma de resolver estos problemas
de manera más ordenada y acelerada. Su propuesta de crear un mecanismo
de reestructuración de la deuda soberana (véase recuadro)
ha desatado un animado debate sobre la estructura del mismo. Se prevé
que el FMI seguirá trabajando en esta reforma en preparación para las
Reuniones Anuales de 2002, en las que se espera debatir la propuesta.
I
Cuando los países no pueden pagar sus
deudas |
Los países, como los individuos, pueden
acumular deudas y verse imposibilitados para pagarlas.
Para evitar el incumplimiento, deben reestructurar
su deuda. Pero, a diferencia de las leyes de quiebra
que rigen en cada país, el sistema financiero mundial
no dispone de un marco legal para que los deudores
soberanos y sus acreedores restructuren la deuda en
forma ordenada y oportuna. Uno de los principales
problemas para la reestructuración de la deuda soberana
proviene de la evolución de los mercados internacionales
de capital en los últimos 20 años: ahora están más
integrados y se prefieren las emisiones de bonos a
los préstamos de consorcios bancarios. Como resultado,
los prestatarios soberanos cada vez pueden emitir
más deuda en una amplia gama de jurisdicciones e instrumentos
y frente a un grupo amplio y diverso de acreedores.
Si bien con ello han aumentado las fuentes de financiamiento
de que disponen los países con mercados emergentes,
también se han agravado los problemas de coordinación,
acción colectiva y trato equitativo de los acreedores
cuando se requiere una reestructuración.
El FMI propone una solución
En noviembre de 2001, la Primera Subdirectora Gerente
del FMI, Anne Krueger, propuso un mecanismo de reestructuración
de la deuda soberana (MRDS) para facilitar la reestructuración
ordenada, previsible y acelerada de la deuda soberana
no viable. Desde noviembre, se han hecho algunas modificaciones
a la propuesta, y en la última versión se prevé una
función decisoria menos importante para el FMI. El
enfoque resultante, que tiene una vía legal y otra
contractual, ha recibido el apoyo de la comunidad
internacional.
Para que el mecanismo sea eficaz,
los deudores han de tener incentivos para hacer frente
a sus problemas cuanto antes; además, los deudores
y acreedores también han de sentirse motivados para
pactar rápidamente las condiciones de la reestructuración.
Las políticas del FMI con respecto a la disponibilidad
de recursos antes, durante y después del proceso ayudarían
a crear estos incentivos. No obstante, el país deudor
es quien decidiría si utiliza o no el mecanismo y
ni el FMI ni los acreedores del país podrían imponerlo.
El país deudor y una mayoría de sus acreedores serían,
en última instancia, quienes decidirían.
Cómo funcionaría el mecanismo
La primera vía del MRDS conllevaría un mayor recurso
a las cláusulas de acción colectiva en los contratos
de bonos soberanos. En la segunda vía se crearía un
mecanismo legal que faculte a una mayoría calificada
de los acreedores de un país para negociar un acuerdo
de reestructuración que, posteriormente, obligaría
a todos los acreedores de ese país. También habría
disposiciones para evitar que los acreedores demanden
a los deudores mientras se negocia un acuerdo de reestructuración,
salvaguardias para proteger los intereses de los acreedores
durante ese período y un mecanismo que estimule al
sector privado para brindar nuevo financiamiento al
garantizar que no habrá reestructuración de los préstamos
privados. El enfoque legal se basaría en un tratado,
quizá mediante una enmienda del Convenio Constitutivo
del FMI, que ofrezca uniformidad jurídica para todas
las legislaciones nacionales.
|
La Primera Subdirectora Gerente
del FMI, Anne Krueger, propuso por primera vez
un plan de reestructuración de la deuda soberana
en noviembre de 2001. |
Para coordinar a los diferentes acreedores
de un deudor, debe establecerse un marco que agrupe
los créditos por categoría de instrumento a los fines
de la votación, teniendo en cuenta su grado de prelación
y los intereses económicos de los acreedores. Como
parte de este marco, se contempla la creación de un
foro de solución de diferencias entre un deudor soberano
y sus acreedores, así como entre los distintos acreedores.
Dicho foro sería pequeño, con funciones limitadas
e independiente en lo que respecta a sus miembros
y su funcionamiento.
La comunidad internacional ha aprendido
la lección de la turbulencia sufrida por las economías
de mercados emergentes en los últimos años: la cooperación
ayuda a que el sistema financiero mundial funcione
mejor. Para hacer frente al prolongado, desordenado
y oneroso proceso de reestructuración, el FMI seguirá
examinando los aspectos jurídicos, institucionales
y de procedimiento que conlleva la creación de un
mecanismo de reestructuración de la deuda soberana.
Véase una explicación más detallada
del MRDS propuesto en el sitio web del FMI (www.imf.org).
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Supervisión eficaz y prevención de las crisis
Ayuda a los países para reducir vulnerabilidades
y fomentar la estabilidad y el crecimiento
En la actual economía mundial, la evolución económica y las decisiones
de política de un país pueden afectar a muchos países y la información
de los mercados financieros puede transmitirse al mismo tiempo por todo
el mundo. En este entorno, es esencial contar con un mecanismo de seguimiento
de la política cambiaria y macroeconómica de los países para que el
sistema monetario internacional funcione eficazmente. El FMI cumple
esta función mediante diálogos periódicos con los países miembros sobre
sus políticas económicas y financieras, y el continuo seguimiento y
evaluación de la economía y las finanzas a nivel nacional, regional
y mundial. Al ejercer esta función, que se conoce como “supervisión”,
el FMI está alerta a las señales de peligro en el panorama económico
y permite a los países tomar medidas correctivas.
Cómo se realiza la supervisión
|
Supervisión de un país. En virtud de una decisión reciente del
Directorio Ejecutivo, el FMI realizará consultas anuales individuales
con los países miembros. (Las consultas se conocen como “consultas del
Artículo IV” porque así lo exige ese artículo del Convenio Constitutivo
del FMI.) Las consultas se centran en los tipos de cambio y las políticas
fiscales y monetarias del país; la evolución de la balanza de pagos
y de la deuda externa; la influencia de sus políticas en las cuentas
externas del país; las repercusiones internacionales y regionales de
sus políticas, y la identificación de posibles vulnerabilidades. Dada
la mayor integración que existe en los mercados financieros del mundo,
la supervisión se centra cada vez más en la cuenta de capital y en temas
del sector financiero y bancario. Cuando resulta pertinente desde una
óptica macroeconómica, la supervisión también abarca políticas que afectan
el mercado laboral, el medio ambiente y la gestión pública.
Supervisión mundial. La publicación semestral Perspectivas de
la economía mundial contiene análisis exhaustivos de las perspectivas
mundiales, regionales y de países individuales, y también análisis de
temas específicos. El informe trimestral Global Financial Stability
Report (GFSR), proporciona información actualizada sobre los mercados
financieros maduros y emergentes como parte del mayor seguimiento de
los mercados financieros que hace el FMI. El informe procura aumentar
el conocimiento de las autoridades sobre las fallas potenciales del
sistema financiero mundial e identificar aquellas que puedan generar
una crisis.
Supervisión regional. Como complemento de las consultas con
los países, el FMI también examina las políticas que se adoptan en acuerdos
regionales y sostiene conversaciones periódicas con la Unión Europea,
la Unión Económica y Monetaria de África Occidental, la Unión Económica
y Monetaria de África Central y la Unión Monetaria del Caribe Oriental.
El FMI está participando más en las iniciativas regionales de los países
miembros, entre ellas la Comunidad del Desarrollo de África Meridional,
la Asociación de Naciones del Asia Sudoriental, el Grupo Marco de Manila,
el Consejo de Cooperación de los Estados Árabes del Golfo, el Mercado
Común para África Meridional y Oriental y las reuniones de los ministros
de Hacienda de América.
Mayor eficacia de la supervisión
Divulgación de información. Es esencial contar con datos oportunos,
fiables y completos. El FMI recomienda a los países más transparencia
en la política y divulgar datos más completos, por ejemplo, mediante
el suministro de datos sobre las reservas externas, los pasivos conexos
y la deuda externa a corto plazo. Para ello, los países miembros que
tienen, o procuran obtener, acceso a los mercados internacionales de
capital pueden acogerse a las Normas Especiales para la Divulgación
de Datos (NEDD).
Continuidad. A fin de que la supervisión se realice en forma
continua y eficaz, el FMI complementa las consultas ordinarias con visitas
a los países y reuniones informales del Directorio Ejecutivo para analizar
hechos importantes en determinados países.
Enfoque. Ante la globalización de los mercados de capital, el
FMI reconoce que su enfoque debe ir más allá de los temas macroeconómicos
de corto plazo. La supervisión debe incluir un examen más minucioso
y detallado del funcionamiento del sector financiero, aspectos de la
cuenta de capital, y la vulnerabilidad externa, incluida la relación
mutua de las políticas y los riesgos de contagio. De las conclusiones
del Programa de evaluación del sector financiero, el FMI y el Banco
Mundial procuran detectar las fallas del sistema financiero que puedan
tener consecuencias macroeconómicas y ayudar a las autoridades nacionales
a tomar las medidas idóneas.
Observancia de normas y códigos. La adopción de normas reconocidas
internacionalmente, o códigos de buenas prácticas, puede mejorar las
políticas y sistemas económicos y financieros y por ende reforzar el
sistema financiero internacional. El seguimiento del cumplimiento de
las normas internacionales por parte de los países incentiva la adopción
y observancia de dichas normas. (véase el examen de los
IOCN) Por consiguiente, la supervisión que ejerce el FMI ofrece
un marco para examinar con las autoridades nacionales el significado
de la evaluación de la observancia de normas y códigos.
Transparencia. La importancia de la credibilidad para mantener
y restablecer la confianza del mercado subraya el valor de la transparencia
de las políticas. El FMI ha tomado medidas para alentar a sus miembros
a dar mayor transparencia a sus políticas y al asesoramiento que brinda.
Para ello, el Directorio Ejecutivo del FMI ha acordado lo siguiente:
- Publicar información sobre los programas de los países que respalda,
incluidas las cartas de intención, los memorandos de política económica
y financiera, los informes de los funcionarios y las declaraciones
del Presidente del Directorio sobre los mismos.
- Publicar información con respecto a la supervisión que ejerce sobre
sus países miembros en notas de información al público e informes
del Artículo IV, si el país está de acuerdo.
- Publicar informes de los funcionarios sobre temas de política, junto
con las notas de información al público, que el Directorio decide
caso por caso.
- Realizar evaluaciones externas e internas de las prácticas del FMI.
- Continuar el diálogo y la consulta con el público sobre la labor
del FMI; a esos efectos, la declaración del programa de trabajo del
Director Gerente se publicó por primera vez en junio de 2001.
- Dar a conocer más información financiera sobre el FMI (por ejemplo,
los estados financieros se publican en el sitio web del FMI).
Examen bienal de la supervisión que
ejerce el FMI |
Cada dos años, el FMI evalúa la supervisión
que ejerce y determina si los principios en que se
basa siguen siendo válidos y se ajustan a la decisión
original del Directorio Ejecutivo de 1977. En su examen
de abril de 2002, el Directorio Ejecutivo comenzó
a evaluar la evolución de la supervisión, tanto el
marco en que se ha desarrollado como en su aplicación
efectiva. El Directorio observó que la cobertura ha
aumentado en el curso de los años, pasando de un enfoque
inicial sobre los tipos de cambio, la política fiscal
y monetaria y el régimen cambiario a las políticas
estructurales, aspectos institucionales y del sector
financiero, y una evaluación más completa y detallada
de la vulnerabilidad de los países frente a las crisis,
prestando mayor atención a la cuenta de capital y
la deuda externa. Este marco más amplio se ha considerado
como una adaptación necesaria y positiva a los cambios
del entorno mundial, sobre todo a la rápida expansión
de los flujos internacionales de capital. La supervisión
generalmente ha logrado el doble objetivo de proporcionar
una cobertura más amplia y de seguir prestando atención
a temas esenciales. Los temas de las consultas del
Artículo IV generalmente se determinan según su pertinencia
macroeconómica según las circunstancias del país.
Los procedimientos actuales de supervisión mundial
funcionan bien y la supervisión multilateral de los
mercados de capital ha mejorado con la creación del
Departamento de Mercados Internacionales de Capital
del FMI, en 2001.
Dada esta trayectoria de cobertura
y enfoque, el Directorio Ejecutivo identificó ciertas
áreas en las que se requiere más esfuerzo para que
el asesoramiento de política que ofrece el FMI resulte
acertado y convincente:
- Una evaluación más franca y completa
de los regímenes cambiarios y tipos de cambio en
el marco de la política macroeconómica debe ser
la práctica normal con todos los países miembros.
- La cobertura de los temas del sector
financiero debe ser igual a la de otras áreas de
la supervisión.
- Debe mejorarse la evaluación de
vulnerabilidades y análisis de viabilidad de la
deuda, sobre todo mediante el uso de pruebas de
esfuerzo válidas y nuevos escenarios.
- La cobertura de temas institucionales,
como el sector público y el gobierno de las sociedades
en ciertos países, a veces ha sido incompleta por
falta de pericia, y debe reforzarse. El trabajo
en las normas y códigos y los informes sobre la
observancia de los códigos y normas son esenciales
para cumplir este objetivo.
- Las cuestiones estructurales ajenas
a las áreas de competencia tradicional del FMI son,
a veces, clave para la situación macroeconómica
de un país y por ende deben abordarse. El FMI debe
hacer uso eficaz de la pericia de otras instituciones
idóneas, sobre todo del Banco Mundial.
- Se puede reforzar el enfoque de
la supervisión centrándose en países cuyas políticas
comerciales tienen una influencia mundial o regional
considerable o producen importantes efectos negativos
sobre las perspectivas macroeconómicas internas.
- Los resultados de los ejercicios
de supervisión multilateral y la ventaja comparativa
del FMI en los análisis por países deben recogerse
en la supervisión bilateral de manera completa y
coherente. Debe prestarse especial atención al impacto
sistémico de las políticas de las mayores economías
en las consultas del Artículo IV con estos países.
- La supervisión debe reexaminarse
en los países que se aplican programas con miras
a lograr que las consultas del Artículo IV con estos
países ofrezcan una eficaz reevaluación de la situación
y la política económicas.
El asesoramiento acertado en los objetivos
de política económica y las consultas con las autoridades
nacionales en torno a los objetivos alternativos y
los factores sociales, políticos e institucionales
mejoraría la identificación con las recomendaciones
y las posibilidades de éxito en la aplicación de las
medidas.
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Oficina de Evaluación Independiente
Endeudamiento prolongado frente al FMI, reformas
fiscales y crisis de la cuenta de capital
La Oficina de Evaluación Independiente (OEI), creada por el Directorio
Ejecutivo del FMI en julio de 2001, realiza evaluaciones objetivas e
independientes de las políticas y operaciones de la institución. No
depende de la gerencia del FMI y opera con autonomía frente al Directorio
Ejecutivo. Mejora la cultura de aprendizaje del FMI, fomenta la comprensión
de su trabajo y apoya al Directorio Ejecutivo en su labor de gestión
y supervisión. Hay grandes probabilidades de que los informes de evaluación
de la OEI se publiquen tras su consideración por el Directorio Ejecutivo
del FMI.
Desde que inició sus operaciones en el tercer trimestre de 2001, la
OEI se ha dedicado a tres proyectos.
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Funcionarios de la OEI (de izq. a der.): Ali Mansoor,
David Goldsbrough, Montek Singh Ahluwalia (Director), Tsidi Tsikata,
Isabelle Mateos y Lago y Kevin Barnes. |
Uso prolongado de los recursos del FMI. En los últimos 50 años,
unos 25 países han estado endeudados frente al FMI durante más de 30
años. En los últimos 18 años, 16 países han estado aplicando programas
respaldados por el FMI durante 12 o más años. Este uso prolongado va
en contra de lo establecido en el Convenio Constitutivo del FMI. Basándose
en estudios de casos de Pakistán, Senegal y Filipinas, y en análisis
comparativos, se trata de responder a las siguientes preguntas: ¿Cuáles
son las causas de esta tendencia de uso repetido de los recursos del
FMI? ¿Hay deficiencias en el diseño de los programas o de otro tipo
que puedan haber contribuido a esta tendencia? ¿Qué costos entraña para
los prestatarios,para el FMI y para los demás países miembros el uso
repetido de los recursos? También se evaluarán las posibles soluciones,
ya sea en el diseño de los servicios y programas de préstamo, en la
gestión interna del FMI o en la división de trabajo con proveedores
de financiamiento a largo plazo. En marzo de 2002, la OEI publicó un
documento temático definitivo y términos de referencia sobre el uso
prolongado de recursos del FMI.
Ajuste fiscal en los programas respaldados por el FMI. El ajuste
fiscal, sobre todo en los países de bajo ingreso, ha sido objeto de
críticas durante mucho tiempo, en gran medida porque contrapone la estabilidad
al crecimiento o al gasto social. A menudo, estas disyuntivas no se
explican o cuantifican adecuadamente y crean problemas de distribución
muy susceptibles a nivel político. Basándose en una muestra de países
(principalmente de bajo ingreso) con acceso limitado a los mercados
internacionales de capital, se examinan en el estudio las principales
características del diseño de los programas fiscales, el diálogo entre
los funcionarios del FMI y las autoridades nacionales y otros grupos,
en qué medida el país se identifica con el programa y los resultados
en términos de eficiencia, sostenibilidad e impacto social del ajuste
fiscal. A mediados de junio de 2002, la OEI publicó un documento temático
definitivo y términos de referencia sobre el ajuste fiscal en los programas
respaldados por el FMI.
Papel del FMI en un grupo de casos recientes de crisis de la cuenta
de capital. Comenzando con México en 1994, varias economías de mercados
emergentes han sufrido crisis cambiarias, en el contexto de creciente
integración de los mercados financieros de los últimos años. Cuando
se acudió al FMI para que ayudara a resolver estas crisis, a veces se
le criticó por no mitigar las consecuencias adversas del rápido y considerable
cambio de sentido de los flujos de capital. La gravedad de la pérdida
de producto en algunos de los países afectados y el impacto de las crisis
sobre la economía mundial han despertado el interés por la forma en
que actuó el FMI entonces y cómo debe hacerlo en el futuro. El estudio,
que se centra en Brasil, Indonesia y Corea, evalúa la eficacia del FMI
en la detección de los problemas antes de desatarse la crisis, y la
de los programas que respaldó para su resolución. Los casos propuestos
constituyen ejemplos contrapuestos de los factores causantes de las
crisis y de los resultados. A mediados de junio de 2002, la OEI publicó
un documento temático definitivo y términos de referencia sobre las
crisis de la cuenta de capital.
En el sitio web de la OEI (www.imf.org/ieo)
puede obtenerse más información sobre el alcance de estos proyectos
y el programa de trabajo de la OEI.
Condicionalidad
EI FMI revisa la condicionalidad y destaca la identificación
de los países con las reformas
Cuando el FMI se compromete a dar apoyo financiero a un país miembro,
se supone que éste realice ajustes y reformas que corrijan los problemas
básicos que dieron origen a las dificultades de balanza de pagos y la
necesidad de ayuda.
¿Por qué es necesaria la condicionalidad?
Las condiciones para el apoyo financiero ayudan a asegurar que los países
prestatarios resuelven ordenadamente sus problemas de balanza de pagos,
sin recurrir a medidas que pueden perjudicar su propia prosperidad o
la de otros. El cumplimiento de las condiciones le garantiza al país
la continuidad del financiamiento.
El FMI, para salvaguardar sus recursos, debe verificar que se realizan
los ajustes necesarios para lograr la sostenibilidad a mediano plazo
que permitirá al país rembolsar sus préstamos.
¿Cómo debe aplicarse la condicionalidad?
La condicionalidad requiere un enfoque flexible porque el FMI debe tratar
equitativamente a sus países miembros, considerando las circunstancias
y problemas de cada uno. Las condiciones deben centrarse en las medidas
de política cruciales para cumplir las metas del programa y aplicarse
con parquedad en otras áreas que no son responsabilidad básica del FMI.
¿Cómo se comprueba?
El FMI exige a las autoridades del país una “carta de intención” o memorando
que describa la política que se proponen aplicar durante el programa;
de ser necesario, las medidas que deben tomar para que el programa sea
aprobado; e indicadores objetivos que indiquen que el país ha cumplido
determinados criterios de ejecución. El FMI examina periódicamente la
evolución de un país comparando la compatibilidad de sus políticas con
los objetivos del programa.
¿Cómo ha cambiado la condicionalidad del FMI?
La condicionalidad ha cambiado en el curso de la historia del FMI de
acuerdo con las circunstancias y las dificultades que enfrentan sus
miembros. Desde los años cincuenta se imponen condiciones al financiamiento
que otorga el FMI, condiciones que se centran en las políticas monetaria,
fiscal y cambiaria.
Desde fines de los años ochenta, el FMI está recalcando más y más en
que es necesario lograr el ajuste a través de mejoras en el lado de
la oferta. Esto ha suscitado un debate sobre la forma en que se deben
abordar los cuellos de botella estructurales. La respuesta del FMI fue
incrementar la condicionalidad estructural. En consecuencia, si a mediados
de los ochenta se imponían en un programa unas 2 ó 3 condiciones estructurales
al año, en el segundo quinquenio de los noventa habían ascendido a 12
o más, aumento que suscitó la inquietud de que el FMI pudiese estar
extralimitándose en su especialización y cometido. Unas condiciones
excesivamente detalladas pueden hacer que un país sienta que no está
a cargo de sus propias reformas, y si así ocurre, no habrá reforma.
Además, una condicionalidad mal enfocada podría agobiar a países que
procuran realizar reformas no esenciales a expensas de las que realmente
se necesitan para el crecimiento económico y el acceso continuo al financiamiento
del FMI.
Para velar por que la condicionalidad siga siendo eficaz, el FMI ha
examinado regularmente su evolución. En el último examen, que empezó
en septiembre de 2000, el FMI tomó medidas para racionalizarla, hacerla
más eficiente, eficaz, transparente y orientarla mejor. Asimismo, se
procuró reforzar la eficacia de los programas centrándose en las condiciones
cruciales para el éxito de los objetivos macroeconómicos de los países,
teniendo en cuenta sus procesos decisorios y su capacidad de ejecución
de las reformas
- Septiembre de 2000: El Director Gerente formuló directrices
provisionales que establecían los principios generales que los funcionarios
aplican en todos los programas económicos que respalda el FMI.
- Marzo de 2001: En el sitio del FMI en Internet se dieron
a conocer los documentos preparados por el personal para que el público
comentara los principios y problemas de la condicionalidad. Los funcionarios
de los países, los académicos y los representantes de otros organismos
también añadieron sus opiniones. Una de las sugerencias fue prestar
atención a la secuencia y ritmo de aplicación de las medidas y a la
importancia de una estrategia clara y coherente de asistencia de la
comunidad internacional.
- Abril de 2002: El Directorio Ejecutivo acordó los principios
generales para las nuevas directrices de condicionalidad, directrices
que se completarán en el cuarto trimestre de 2002.
¿Puede mejorarse la identificación de los países con los programas?
Las autoridades de los países deben intervenir en las primeras etapas
del diseño de los programas. Tienen que estar convencidas de que las
reformas pueden lograrse y que benefician al país. Además, esto deberá
ocurrir no sólo en el poder ejecutivo, sino también en el parlamento
y otros grandes sectores interesados.
El FMI debe estar dispuesto a aceptar programas que, si bien no son
la opción preferida de la institución, no comprometen los objetivos
básicos del programa.
¿Qué ocurre si un país no asume plenamente el compromiso?
El FMI tiene que reforzar el análisis de la economía política para entender
mejor los problemas que pueden frenar o debilitar la ejecución de un
programa. Debe establecer un diálogo más eficaz sobre las opciones factibles
y seleccionar mejor los programas que apoya.
En los países que tienen problemas estructurales arraigados, en los
que habrá una prolongada intervención del FMI, conviene que el país
emprenda la búsqueda de un consenso que fortalezca su identificación
con políticas eficaces.
La asistencia técnica del FMI podría reorientarse hacia el mediano
y largo plazo y el fortalecimiento de las capacidades (incluido el diseño
de programas) de los países, ya que esto los ayudaría a liderar sus
políticas económicas.
A las autoridades nacionales compete la responsabilidad primaria de
comunicar al público la intención y el contenido de los programas, mientras
el FMI cumple un papel de apoyo.
Servicios financieros
Obtención y concesión de préstamos del FMI
El volumen de financiamiento que el FMI ha brindado a sus países miembros
ha variado mucho en el transcurso del tiempo. Tras la crisis petrolera
de los años setenta y la crisis de la deuda de los ochenta se produjo
un fuerte aumento de los préstamos que ofrece la institución. En los
años noventa, la transición de Europa central y oriental y las crisis
de las economías de mercados emergentes dieron un nuevo impulso a la
demanda de crédito del FMI.
Solo los países que son miembros del FMI pueden obtener préstamos.
La afiliación al FMI es prácticamente universal, con 184 países miembros
en la actualidad.
¿Por qué y cómo otorga préstamos el FMI?
El FMI concede asistencia financiera a los países miembros que registran
dificultades transitorias de balanza de pagos. No otorga financiamiento
para fines o proyectos específicos, como lo hacen normalmente los bancos
de desarrollo (véase “El FMI: Datos básicos”). El
Directorio Ejecutivo del FMI debe aprobar la asistencia financiera..
El financiamiento se otorga por tres medios:
- La asistencia financiera ordinaria se ofrece—a un interés correspondiente
a la tasa de cargos normal del FMI— a través de varias políticas y
servicios diseñados para atender ciertos problemas de balanza de pagos.
- El FMI otorga préstamos a bajos intereses a los países de bajo ingreso
en virtud del servicio para el crecimiento y la lucha contra la pobreza
(SCLP) que les ayuda a reestructurar sus economías para aumentar el
crecimiento y reducir la pobreza. El FMI también otorga donaciones
o préstamos sin intereses a países miembros habilitados para la Iniciativa
reforzada para los países pobres muy endeudados (PPME) a fin de ayudarles
a reducir su deuda externa a niveles viables. (véase "Más
información sobre el SCLP y la Iniciativa reforzada para los PPME")
- El FMI también puede crear activos internacionales de reserva mediante
la asignación de DEG a sus miembros, y que ellos pueden utilizar para
obtener divisas de otros países y para efectuar pagos al FMI (véase
"¿Qué es el DEG?").
El financiamiento se otorga en virtud de diversos servicios y políticas
(véase cuadro). Las principales políticas son
las de tramos de crédito, que atienden dificultades cíclicas y a corto
plazo de balanza de pagos, y el servicio ampliado del FMI (SAF), para
hacer frente a dificultades de pagos externos derivadas de problemas
estructurales de más largo plazo. Los préstamos pueden complementarse
con recursos a muy corto plazo en virtud del servicio de complementación
de reservas (SCR) para asistir a países perturbados por la pérdida repentina
de acceso a los mercados de capital.
El FMI impone cargos por su financiamiento. Los cargos y plazos de
reembolso varían según el servicio. El monto de financiamiento que puede
obtener un país miembro generalmente se basa en el volumen de su cuota.
El FMI ha creado también servicios especiales de asistencia adicional
para ciertas dificultades de ba- lanza de pagos, como las de etapas
posteriores a las guerras o catástrofes naturales.
Para desalentar el uso excesivo de sus recursos y liberar fondos para
el uso por otros países, el FMI aplica sobretasas a los saldos insolutos
de crédito que superen cierto nivel. El FMI también impone sobrecargos
por los recursos del SCR.
El FMI ha establecido un calendario acelerado de vencimientos para
fomentar el pronto pago de sus créditos. Los países miembros deben rembolsar
los créditos por anticipado con respecto al calendario normal; los que
tengan dificultades en hacerlo pueden solicitar una prórroga, que en
ningún caso podrá exceder el calendario ordinario de vencimientos.
¿De dónde sale el dinero del FMI?
Las suscripciones de capital de sus países miembros son la principal
fuente de recursos financieros para el FMI. Cuando un país ingresa en
el FMI paga una suscripción equivalente a su cuota (véase
"Cuotas"). El FMI también tiene dos líneas de crédito
con ciertos países miembros para complementar sus recursos en casos
de excepcional demanda de asistencia financiera. Ellas son los Acuerdos
Generales para la Obtención de Préstamos (AGP) y los Nuevos Acuerdos
para la Obtención de Préstamos (NAP), que actualmente no se están utilizando.
Se activaron por última vez en 1998 después de la crisis financiera
de Asia y antes de que entrara en vigor el último aumento de cuotas.
El FMI está autorizado para obtener préstamos en los mercados de capital
privado y varias veces ha estudiado esa opción, pero siempre ha llegado
a la conclusión de no hacerlo debido a problemas de organización y operación.
Los recursos del SCLP y la Iniciativa PPME se financian a través de
contribuciones de un amplio espectro de países miembros y del FMI mismo;
son independientes de las cuotas y se administran mediante los fondos
fiduciarios SCLP y SCLP-PPME, cuyo fideicomisario es el FMI. La Cuenta
Fiduciaria del SCLP recibe recursos (de bancos centrales, gobiernos
e instituciones gubernamentales) a tasas de interés de mercado o menores,
que se prestan al 0,5% de interés a los países habilitados para hacer
uso del SCLP. Esta cuenta recibe aportaciones para subsidiar la tasa
de interés de los préstamos del SCLP y mantiene una Cuenta de Reservas
(que garantiza los créditos que otorga).
Términos y condiciones de
los distintos servicios financieros del FMI |
|
Condiciones de rembolso
|
Servicio o mecanismo |
Cargos
|
Calendario
de rembolso
(años)
|
Calendario
anticipado1
(años)
|
Calendario
de cuotas
(years)
|
Servicios ordinarios |
Acuerdo de derecho de giro |
Tasa básica más sobretasa2 |
3 1/4–5 |
2 1/4–4 |
Quarterly |
Servicio ampliado del FMI |
Tasa básica más sobretasa2 |
4 1/2–10 |
41/2–7 |
Semestral |
Servicio de financiamiento compensatorio |
Tasa básica |
3 1/4–5 |
2 1/4–4 |
Trimestral |
Asistencia de emergencia |
Tasa básica |
3 1/4–5 |
. . .3 |
Trimestral |
Servicio de complementación de reservas |
Tasa básica más 150–350 |
2–21/2 |
1–1 1/2 |
Semestral |
Líneas de crédito contingente
|
Basic rate plus 150–350 basis points |
2–2 1/2 |
1–1 1/2 |
Semestral |
|
Servicios concesionarios |
Servicio para el crecimiento y la lucha contra
la pobreza |
0.5 percent a year |
51/2–10 |
. . .3 |
Semestral |
|
Partidas informativas (aplicables
a los servicios ordinarios): |
Comisión de giro |
0.5 percent |
Comisión por compromiso de recursos |
25 basis points on committed
amounts of up to 100 percent of quota,
10 basis points thereafter |
|
1Los desembolsos efectuados después
del 28 de noviembre de 2000, salvo los correspondientes
a asistencia de emergencia y préstamos del servicio para
el crecimiento y la lucha contra la pobreza, están sujetos
al calendario de rembolso anticipado, al igual que los correspondientes
al servicio de complementación de reservas y las líneas
de crédito contingente.
2Se aplica una sobretasa al crédito total pendiente
en virtud de los acuerdos de derecho de giro y servicio
ampliado del FMI correspondiente a 100 (200) puntos básicos
sobre los montos que superan el 200% (300%) de la cuota.
3No es aplicable.
Fuente: Departamento de Tesorería del FMI.
|
|
¿Cuánto puede prestar el FMI?
Los recursos del FMI son limitados. Solo se puede recurrir a una parte
de las cuotas suscritas, ya que no se pueden utilizar las monedas de
los países que reciben asistencia del FMI o que el Directorio Ejecutivo
no considera fuertes. Además, la posición de liquidez del FMI se redujo
por la demanda corriente de asistencia (los compromisos no girados de
acuerdos vigentes) y la necesidad de mantener siempre un monto de recursos
adicionales como saldos de operación.
Financiamiento del FMI en 2001/2002 |
La desfavorable situación económica
y financiera mundial contribuyó al fuerte aumento
de los nuevos compromisos del FMI, que ascendieron
a DEG 41.300 millones en el ejercicio 2002, frente
a DEG 14.500 millones en el de 2001.
En el marco de sus servicios financieros
ordinarios (no concesionarios), el FMI aprobó
nueve acuerdos de derecho de giro por un compromiso
total de DEG 26.700 millones, en su mayor parte destinados
a Brasil y Turquía, y se aumentaron en DEG 12.700
millones los compromisos a favor de Argentina y Turquía
al amparo de acuerdos ya vigentes. El total de giros
en el marco de los servicios ordinarios de financiamiento
del FMI ascendió a DEG 29.100 millones, y los rembolsos
a DEG 19.200 millones. Por consiguiente, el crédito
pendiente se incrementó en DEG 9.900 millones, hasta
un total de DEG 52.100 millones al 30 de abril de
2002.
En el ejercicio 2002 concluyó la movilización
de préstamos y donaciones para continuar el servicio
para el crecimiento y la lucha contra la pobreza (SCLP)
en el período 2002–05 y la Iniciativa para los
países pobres muy endeudados (PPME), y 10 prestamistas
otorgaron nuevos préstamos, por DEG 4.400 millones,
para financiar futuras operaciones del SCLP. Durante
el ejercicio, el Directorio Ejecutivo aprobó 9 nuevos
acuerdos en el marco del SCLP, por un valor total
de DEG 1.800 millones. Además, se aprobó el aumento
de los compromisos vigentes por un total de DEG 66
millones. En el ejercicio 2002, los desembolsos totales
en el marco del SCLP ascendieron a unos DEG 1.000
millones, frente a DEG 600 millones en el ejercicio
anterior. Al 30 de abril de 2002, el FMI también había
comprometido asistencia (donaciones) en el marco de
la Iniciativa para los PPME por valor de DEG 1.600
millones a 26 países que habían alcanzado el punto
de decisión en el marco reforzado. De estos compromisos
se han desembolsado DEG 700 millones.
El 4 de mayo de 2001 se estableció
una cuenta administrada para recibir aportaciones
de donantes bilaterales que permitan al FMI ofrecer
asistencia de emergencia a países en etapa de posguerra
habilitados para el SCLP a una tasa de cargos concesionaria
de 0,5% anual. Al 30 de abril de 2002, se habían comprometido
aportaciones por un total de DEG 7 millones, de los
cuales el Reino Unido y Suecia habían pagado DEG 1,4
millones. En el ejercicio, los desembolsos ascendieron
a DEG 800.000 para subvencionar la tasa de cargos
correspondiente a la asistencia para seis países en
etapa de posguerra (Albania, la República del Congo,
Guinea-Bissau, Rwanda, Sierra Leona y Tayikistán).
|
|
|
Pagos en mora
Para conservar el carácter cooperativo y proteger los recursos financieros
del FMI y mantener abiertas otras fuentes de crédito, los países miembros
deben cumplir a tiempo con sus obligaciones financieras frente al FMI.
No obstante, si un país incurre en atrasos en sus obligaciones del servicio
de la deuda, se supone que tomará medidas que le permitan liquidarlos
lo antes posible.
La estrategia del FMI para ayudar a evitar nuevos casos de atrasos
tiene tres elementos principales:
Prevención. Para evitar la aparición de nuevos atra- sos, el
FMI condiciona el uso de sus recursos, evalúa la capacidad de rembolso
de los países miembros, colabora con los donantes y otros acreedores
oficiales, realiza evaluaciones de las salvaguardias de los bancos centrales
que reciben sus recursos y presta asistencia técnica a los países.
Colaboración reforzada y enfoque de los derechos. La colaboración
reforzada ayuda a los países a diseñar e instrumentar políticas económicas
orientadas a resolver sus problemas de balanza de pagos y de atrasos.
También permite a los miembros con atrasos establecer un historial de
medidas de política y pagos, movilizar recursos de acreedores y donantes
internacionales y ponerse al día en el pago de sus obligaciones frente
al FMI y otros acreedores.
En ciertos casos, las políticas económicas de un país se formulan en
el marco de un “programa de acumulación de derechos”. Dicho programa
permite a los países con atrasos persistentes (una mora mayor de seis
meses en sus deudas al FMI) acumular “derechos” a efectuar giros futuros
contra recursos del FMI por las medidas de ajuste y reforma que tome.
Los giros solo se efectúan una vez que el país miembro ha concluido
el programa y liquidado sus atrasos y el FMI ha aprobado acuerdos sucesores.
Solamente 11 países miembros han sido habilitados para participar en
este enfoque y, de ellos, solo Liberia, Somalia y Sudán siguen en mora.
Medidas correctivas. La estrategia frente a los atrasos incluye
un calendario de medidas correctivas de creciente intensidad que se
aplican cuando los países miembros no cooperan activamente con el FMI
para resolver sus problemas de atrasos. Estas medidas pueden abarcar
desde una restricción temporal al uso de los recursos del FMI por parte
del país hasta su separación obligatoria de la institución.
El total de atrasos persistentes frente al FMI en el ejercicio 2002
subió a DEG 2.360 millones al 30 de abril de 2002 frente a DEG 2.240
millones en el ejercicio anterior. Este aumento obedeció a los atrasos
que siguió acumulando Zimbabwe—primer caso de acumulación de atrasos
en el marco del SCLP—y a un nuevo aumento de los atrasos de la
mayoría de los países con atrasos persistentes. Además de Zimbabwe,
otros tres países con atrasos persistentes (Liberia, Somalia y Sudán)
representan casi la totalidad de las obligaciones financieras en mora
del FMI..
Desde abril de 2002, la República Democrática del Congo, con la ayuda
de préstamos puente de Bélgica, Francia, Sudáfrica y Suecia, eliminó
sus atrasos frente al FMI (que ascendían a DEG 400 millones), lo cual
redujo el total de obligaciones en mora frente al FMI a menos de DEG
2.000 millones, el nivel más bajo registrado desde marzo de 1988. Tras
la eliminación de los atrasos, el Directorio Ejecutivo levantó las medidas
correctivas impuestas a la República Democrática del Congo y restableció
su habilitación para utilizar recursos del FMI y sus derechos en la
institución, incluido el de voto. Esta decisión también allanó el camino
para la aprobación de un acuerdo trienal en el marco del SCLP por valor
de DEG 580 millones.
¿Cuánto cobra el FMI por sus préstamos?
El FMI, al igual que otras instituciones financieras, obtiene ingresos
por los intereses y cargos que cobra a los miembros que utilizan sus
recursos. Además, el FMI devenga intereses por sus tenencias de DEG,
un activo de reserva que produce intereses.
Al comienzo del ejercicio financiero se determina la tasa de cargos
básica por el uso de recursos del FMI que permita cumplir la meta de
ingresos acordada para el año. Esta tasa (un porcentaje de la tasa de
interés del DEG) se establece de modo que sufrague el costo de los fondos
y los gastos administrativos, y complemente las reservas del FMI. Al
final del año, todo ingreso que exceda de la meta se devuelve a los
países miembros que pagaron intereses durante el año y las insuficiencias
de ingresos se compensan al año siguiente.
Además de los cargos básicos, el FMI también cobra a los países miembros
deudores comisiones de giro, comisiones por compromiso, y cargos especiales
por mora en el pago del principal.
El FMI impone sobretasas para desalentar el uso excesivo de crédito
en los tramos de crédito y al amparo del servicio ampliado del FMI,
que se basan en el total de crédito pendiente de cada país en relación
con su cuota. Además, el FMI aplica sobretasas a los préstamos en el
marco del servicio de complementación de reservas y las líneas de crédito
contingente, dos servicios en los que el monto desembolsado a los países
es elevado. El ingreso derivado de las sobretasas se añade a las reservas
del FMI y no se tiene en cuenta al determinar la meta de ingreso neto
del año.
El FMI incrementa las tasas de cargos que cobra y las de remuneración
que paga a fin de distribuir el costo de las obligaciones financieras
en mora equitativamente entre sus acreedores y deudores. Cuando los
países miembros liquidan sus cargos en mora, el FMI rembolsa los montos
adicionales recaudados. El mismo mecanismo se utiliza para financiar
suplementos a la Cuenta Especial para Contingencias, establecida para
proteger al FMI contra las pérdidas que podría originar el incumplimiento
de los países miembros en sus obligaciones financieras.
Salvaguardia de los recursos del FMI
El FMI realiza una evaluación de las salvaguardias para velar por
que los bancos centrales de los países que reciben asistencia financiera
tengan controles apropiados para administrar sus recursos, entre ellos
los del FMI. La evaluación de las salvaguardias se realiza en los bancos
centrales porque éstos son los que comúnmente reciben los recursos del
FMI.
La política de salvaguardias se inició en marzo de 2000 con carácter
experimental a raíz de la declaración incorrecta de información sobre
las reservas internacionales de dos países con programas respaldados
por el FMI y denuncias de mal uso de los recursos del FMI. En la evaluación
de las salvaguardias, el FMI examina los sistemas de control interno,
contabilidad, declaración de datos y auditoría de los bancos centrales
de los países prestatarios y propone remedios para las vulnerabilidades
detectadas. En ciertos casos, las medidas propuestas deben ponerse en
práctica para poder efectuar nuevos desembolsos de los recursos del
FMI al país.
La política de salvaguardias ha despertado más conciencia en los bancos
centrales sobre la necesidad de transparencia y buena gestión. La política
también ha reforzado la fama de prestamista prudente del FMI.
Asistencia técnica
EI aumento de las necesidades se traduce en una
mayor demanda de la asistencia técnica del FMI
El FMI proporciona asistencia técnica a los países miembros en esferas
que forman parte de su cometido básico, a saber, política macroeconómica,
monetaria, cambiaria y fiscal, deuda externa y estadísticas. La institución
empezó a prestar asistencia técnica en 1964 a varios países africanos
y asiáticos recientemente independizados que la solicitaron para la
creación de bancos centrales y ministerios de Hacienda.
Las actividades de asistencia técnica aumentaron rápidamente y, a mediados
de los años ochenta, el número de años—persona dedicados a estas
actividades casi se había duplicado. En los años noventa, muchos países—de
Europa oriental y los que formaban parte de la Unión Soviética—iniciaron
la transición de una economía centralizada a un sistema de mercado,
y solicitaron asistencia técnica al FMI. Además, éste ayudó a varios
países y entidades territoriales a crear instituciones públicas tras
graves disturbios civiles, por ejemplo, en Angola, Camboya, Haití, Kosovo,
Líbano, Namibia, Rwanda, Timor Oriental y Yemen. Además de respaldar
el trabajo de prevención y gestión de las crisis, y restablecer la estabilidad
macroeconómica una vez superadas éstas, el FMI ofrece asistencia a los
países que ponen en práctica las recomendaciones de las evaluaciones
del sector financiero, adoptando normas y códigos internacionales, mejorando
el control del gasto público y luchando contra el lavado de dinero y
el financiamiento del terrorismo.
The IMF’s technical assistance has grown from just under 70 person-years
in 1970 to approximately 340 person-years annually and represents about
25 percent of the IMF’s total administrative budget.
Tipos de asistencia técnica
La asistencia técnica del FMI abarca tres grandes áreas:
- Diseño y ejecución de políticas fiscales y políticas monetarias.
- Redacción y revisión de proyectos de ley, reglas y procedimientos
económicos y financieros.
- Fortalecimiento de las instituciones y las capacidades de bancos
centrales, tesorerías, direcciones tributarias y aduaneras, y servicios
estadísticos.
La asistencia técnica se proporciona a través de misiones, envío de
expertos a corto y largo plazo y centros regionales de asistencia técnica.
Se han creado dos centros regionales de asistencia técnica, uno que
atiende a las pequeñas economías insulares del Pacífico y el otro a
los países del CARICOM ercado de dinero, yy la República Dominicana.
Está previsto abrir otros dos centros en África este año (véase "EI
FMI y África: Una panorámica"). Además, el FMI capacita a funcionarios
de los países miembros mediante cursos en la sede de Washington, el
Instituto Multilateral de Viena, el Instituto Regional de Capacitación
del FMI en Singapur, el Instituto Multilateral Africano, el Centro Regional
Conjunto de Capacitación para América Latina y otros centros regionales
y subregionales. La asistencia se ofrece a través de diversos departamentos
del FMI.
El Departamento de Asuntos Monetarios y Cambiarios se centra
en los temas relacionados con la banca central y los regímenes cambiarios,
y en el diseño y la mejora de los instrumentos de política monetaria.
La asistencia que brinda abarca la reglamentación, supervisión y reestructuración
bancarias; la gestión y las operaciones cambiarias; la organización,
gestión y contabilidad de los bancos centrales; los sistemas de compensación
y liquidación de pagos; las operaciones monetarias y la evolución del
m la investigación y el análisis monetarios.
El Dofrece asesoramiento y fortalecimiento de las capacidades
en materia de recaudación de ingresos y administración tributaria y
aduanera, gestión del gasto público, incluidas la preparación y la ejecución
del presupuesto y las operaciones de tesorería, así como en cuestiones
relativas a la reforma de los planes de jubilación y las redes de protección
social.
El Departamento de Estadística ayuda a los países a cumplir
las normas internacionales de declaración de estadísticas. El acuerdo
sobre las Normas Especiales para la Divulgación de Datos ha incrementado
la demanda de asistencia técnica, que abarca las estadísticas monetarias
y de balanza de pagos, las cuentas nacionales y las finanzas públicas.
El Instituto del FMI ofrece capacitación a los funcionarios
en la sede de la institución, en sus centros regionales y por medio
de cursos que se dictan en los países. Los cursos y los seminarios abarcan
una amplia gama de temas, como programación y políticas financieras,
análisis financiero, finanzas públicas, políticas del sector exterior,
estadísticas, supervisión bancaria y operaciones monetarias y cambiarias.
Además, el Instituto administra programas de becas para economistas
de Asia financiados por Japón y Australia en esos países y en universidades
de Estados Unidos y Canadá.
El Departamento Jurídico ayuda a los países miembros a preparar
proyectos de ley y asesora a los abogados del Estado, sobre todo en
lo relativo a las leyes de banca central, banca comercial, cambios y
finanzas públicas.
El Departamento de Elaboración y Examen de Políticas ofrece
asesoramiento en materia de política y gestión de la deuda, y diseño
y ejecución de reformas de la política comercial.
El Departamento de Tesorería brinda asistencia técnica y capacitación
en la organización y las operaciones financieras del FMI, la creación
y el mantenimiento de las cuentas de la institución, la contabilidad
de las transacciones y la posición de los países en el FMI, y otros
aspectos de las transacciones de los países miembros con la institución.
El Departamento de Tecnología y Servicios Generales ayuda a
los países miembros a informatizar y modernizar las operaciones de los
bancos centrales, los ministerios de Hacienda y las oficinas estadísticas.
Cooperación externa
En los últimos años, han aumentado el alcance y la complejidad de los
proyectos de asistencia técnica, lo cual requiere diversas fuentes de
financiamiento. En los grandes proyectos pueden participar más de un
departamento del FMI y más de un organismo de desarrollo. El FMI colabora
con donantes, como las Naciones Unidas y el Programa de las Naciones
Unidas para el Desarrollo, el Banco Mundial, el Banco Asiático de Desarrollo,
la Unión Europea y los gobiernos de Australia, Canadá, Dinamarca, Estados
Unidos, Francia, Irlanda, Italia, Japón, Nueva Zelandia, los Países
Bajos, el Reino Unido y Suiza. El Gobierno de Japón también hace generosos
aportes anuales a los programas de becas del FMI. Los acuerdos de cooperación
con donantes multilaterales y bilaterales no sólo brindan respaldo financiero,
sino que también ayudan a evitar recomendaciones contradictorias y repetición
de actividades y han dado un enfoque más integrado a la planificación
y ejecución de la asistencia técnica. A medida que aumente la demanda
de asistencia técnica en gestión macroeconómica y financiera, estos
mecanismos se tornarán incluso más valiosos.
|
Un equipo de técnicos del FMI visita un centro
de recaudación de impuestos en Kabul, Afganistán. |
Ante la demanda cada vez mayor de asistencia técnica, el FMI establece
prioridades claras para que los recursos se asignen a los países miembros
y las regiones de la forma más eficaz y eficiente posible. Los departamentos
regionales del FMI desempeñan una función importante en la identificación
de las necesidades de los países y el Comité de Asistencia Técnica,
integrado por técnicos de alto nivel de varios departamentos del FMI
y presidido por un Subdirector Gerente, participa en este proceso. Se
ha creado la Oficina de Gestión de la Asistencia Técnica para ayudar
a la gerencia a formular pautas para el suministro de asistencia técnica
y su coordinación dentro del FMI, así como en la colaboración con los
donantes asociados y los proveedores de asistencia técnica.
Se han determinado una serie de condiciones consideradas esenciales
para el éxito en la implementación de la asistencia técnica, en particular:
el compromiso de las autoridades de emprender reformas institucionales
y de política, un entorno macroeconómico estable e integrado y una estructura
administrativa adecuada con funcionarios nacionales calificados.
Cuotas
Elementos básicos del FMI
|
Timor Oriental se convirtió en el país miembro
número 184 del FMI el 23 de julio de 2002. Arriba, el Primer Ministro
de Timor Oriental, Mari Alkatiri (izq.), recibe la bienvenida al
FMI por parte del Director Gerente del FMI, Horst Köhler. |
El FMI es una cooperativa financiera parecida en cierto modo a una
asociación de crédito. Cuando un país ingresa en el FMI paga una suscripción
equivalente a su cuota (véase recuadro).
La cuota de un país generalmente depende de su posición económica en
relación con la de otros países miembros y de su PIB, de sus transacciones
de la cuenta corriente y de sus reservas oficiales.
El total de suscripciones de capital de los países miembros constituye
un acervo de recursos que el FMI utiliza para asistir a los países que
sufren dificultades financieras transitorias. Un nivel adecuado de recursos
permite al FMI otorgar financiamiento con fines de balanza de pagos
para apoyar a los países que aplican programas de reforma económica
y financiera.
A intervalos periódicos de no más de cinco años, el Directorio Ejecutivo
revisa las cuotas y determina—en función de la evolución de la
economía mundial y de los cambios en la situación económica de cada
país miembro en relación con los demás—si se debe proponer un aumento
a la Junta de Gobernadores. En cuatro de dichas revisiones se llegó
a la conclusión de que no hacían falta aumentos.
¿Qué son las cuotas? |
La cuota de un país miembro define
la base de su relación con el FMI.
Suscripción: La suscripción
de un país miembro del FMI equivale a su cuota. El
país miembro debe pagar enteramente su suscripción:
hasta el 25% en los activos internacionales de reserva
que determine el FMI (DEG o monedas de reserva ampliamente
aceptadas, como dólares de EE.UU., euros, yenes o
libras esterlinas) y el resto en su propia moneda.
Número de votos: Cada país
miembro tiene 250 votos básicos más 1 voto adicional
por cada DEG 100.000 de cuota. Así pues, la cuota
define el número de votos del país en el FMI.
Acceso al financiamiento: El
monto de financiamiento que puede obtener del FMI
un país miembro (límites de acceso) se basa en parte
en su cuota.
Asignación de DEG: La proporción
de DEG que le corresponde a cada país se fija en función
de su cuota.
|
|
|
Los países miembros pueden solicitar en todo momento
un ajuste de su cuota. El caso más reciente fue el de China que, al
recuperar su soberanía sobre Hong Kong en 1997, solicitó en 2001 un
aumento de su cuota, que pasó de DEG 4.687,2 millones a DEG 6.369,2
millones.
En 1998, al concluir la undécima revisión general de cuotas, la Junta
de Gobernadores del FMI aprobó un incremento del 45% en el total de
cuotas, que se incrementaron de DEG 146.000 millones (unos US$200.000
millones en ese momento) a los actuales DEG 213.000 millones (unos US$282.000
millones). Esta decisión se basó en la expansión de la economía mundial
registrada desde 1990, en la cuantía de los posibles desequilibrios
en los pagos, en la rápida globalización y liberalización del comercio,
los pagos y la cuenta de capital, y en las necesidades de liquidez actuales
y previstas del FMI, así como en las características de sus mecanismos
de financiamiento.
Evolución
La duodécima revisión general de cuotas se inició oficialmente en diciembre
de 2001. Como parte de este proceso, el Directorio Ejecutivo celebró
un seminario en febrero de 2002 sobre los aspectos conceptuales que
conlleva la evaluación de la suficiencia de los recursos del FMI. El
seminario ofreció la oportunidad de intercambiar opiniones en torno
a las repercusiones de la evolución de la economía mundial y de las
funciones del FMI sobre la base de recursos de la institución. En un
documento posterior, los técnicos del FMI, basándose en estas opiniones,
medirán la posible magnitud de dichos recursos conforme a diversos escenarios.
El Directorio Ejecutivo también ha realizado una revisión integral
de las fórmulas que utiliza el FMI para calcular las cuotas de cada
país miembro, a fin de simplificarlas y actualizarlas conforme a la
evolución de la economía mundial y a la importancia cada vez mayor de
los mercados financieros. En octubre de 2001 y junio de 2002, el Directorio
examinó documentos de los funcionarios en relación con las fórmulas
de las cuotas y, a petición suya, un grupo de expertos externos examinó
dichas fórmulas y formuló sus recomendaciones. En la actualidad, el
Directorio está a la espera de los resultados de otro análisis de los
técnicos del FMI.
Tras su independencia en mayo de 2002, Timor Oriental se convirtió
en el país miembro número 184 del FMI el 23 de julio de 2002, con una
cuota de DEG 8,2 millones.
Cuotas en el FMI
(Millones de DEG) |
Member |
Aug. 15, 2002
|
Member |
Aug. 15, 2002
|
Afganistán, Estado Islámico
del
Albania
Alemania
Angola
Antigua y Barbuda
Arabia Saudita
Argelia
Argentina
Armenia
Australia
Austria
Azerbaiyán
Bahamas, Las
Bahrein
Bangladesh
Barbados
Belarús
Bélgica
Belice
Benin
Bhután
Bolivia
Bosnia y Herzegovina
Botswana
Brasil
Brunei Darussalam
Bulgaria
Burkina Faso
Burundi
Cabo Verde
Camboya
Camerún
Canadá
Chad
Chile
China
Chipre
Colombia
Comoras
Congo, Rep. Dem. del
Congo, República del
Corea
Costa Rica
Côte d’Ivoire
Croacia
Dinamarca
Djibouti
Dominica
Ecuador
Egipto
El Salvador
Emiratos Árabes Unidos
Eslovenia
España
Estados Unidos
Eritrea
Estonia
Etiopía
Fiji
Filipinas
Finlandia
Francia
Gabón
Gambia
Georgia
Ghana
Granada
Grecia
Guatemala
Guinea
Guinea-Bissau
Guinea Ecuatorial
Guyana
Haití
Honduras
Hungría
India
Indonesia
Irán, República Islámica del 1.
Iraq
Irlanda
Islandia
Islas Marshall
Islas Salomón
Israel
Italia
Jamaica
Japón
Jordania
Kazajstán
Kenya
Kiribati
Kuwait
Lesotho
Letonia
|
120,4
48,7
13.008,2
286,3
13,5
6.985,5
1.254,7
2.117,1
92,0
3.236,4
1.872,3
160,9
130,3
135,0
533,3
67,5
386,4
4.605,2
18,8
61,9
6,3
171,5
169,1
63,0
3.036,1
150,0
640,2
60,2
77,0
9,6
87,5
185,7
6.369,2
56,0
856,1
6.369,2
139,6
774,0
8,9
533,0
84,6
1.633,6
164,1
325,2
365,1
1.642,8
15,9
8,2
302,3
943,7
171,3
611,7
231,7
3.048,9
37.149,3
15,9
65,2
133,7
70,3
879,9
1.263,8
10.738,5
154,3
31,1
150,3
369,0
11,7
823,0
210,2
107,1
14,2
32,6
90,9
60,7
129,5
1.038,4
4.158,2
2.079,3
497,2
504,0
838,4
117,6
3,5
10,4
928,2
7.055,5
273,5
13.312,8
170,5
365,7
271,4
5,6
1.381,1
34,9
126,8
|
Líbano
Liberia
Libia
Lituania
Luxemburgo
Macedonia, ex Rep. Yug. de
Madagascar
Malasia
Malawi
Maldivas
Malí
Malta
Marruecos
Mauricio
Mauritania
México
Micronesia, Estados Federados de
Moldova
Mongolia
Mozambique
Myanmar
Namibia
Nepal
Nicaragua
Níger
Nigeria
Noruega
Nueva Zelandia
Omán
Países Bajos
Pakistán
Palau
Panamá
Papua Nueva Guinea
Paraguay
Perú
Polonia
Portugal
Qatar
Reino Unido
República Árabe Siria
República Centroafricana
República Checa
República Democrática Popular Lao
República Dominicana
República Eslovaca
República Kirguisa
Rumania
Rusia
Rwanda
Saint Kitts y Nevis
Samoa
San Marino
Santa Lucía
San Vicente y las Granadinas
Santo Tomé y Príncipe
Senegal
Seychelles
Sierra Leona
Singapur
Somalia
Sri Lanka
Sudáfrica
Sudán
Suecia
Suiza
Suriname
Swazilandia
Tailandia
Tanzanía
Tayikistán
Timor Oriental1
Togo
Tonga
Trinidad y Tabago
Túnez
Turkmenistán
Turquía
Ucrania
Uganda
Uruguay
Uzbekistán
Vanuatu
Venezuela
Vietnam
Yemen, República del
Yugoslavia, Rep. Fed. de
Zambia
Zimbabwe
Total
|
203,0
71,3
1.123,7
144,2
279,1
68,9
122,2
1.486,6
69,4
8,2
93,3
102,0
588,2
101,6
64,4
2.585,8
5,1
123,2
51,1
113,6
258,4
136,5
71,3
130,0
65,8
1.753,2
1.671,7
894,6
194,0
5.162,4
1.033,7
3,1
206,6
131,6
99,9
638,4
1.369,0
867,4
263,8
10.738,5
293,6
55,7
819,3
52,9
218,9
357,5
88,8
1.030,2
5.945,4
80,1
8,9
11,6
17,0
15,3
8,3
7,4
161,8
8,8
103,7
862,5
44,2
413,4
1.868,5
169,7
2.395,5
3.458,5
92,1
50,7
1.081,9
198,9
87,0
8,2
73,4
6,9
335,6
286,5
75,2
964,0
1.372,0
180,5
306,5
275,6
17,0
2.659,1
329,1
243,5
467,7
489,1
353,4
212,666.1
|
1El 29 de mayo de
2002, la Junta de Gobernadores del FMI aprobó la solicitud
de ingreso de Timor Oriental al FMI. Las autoridades de Timor
Oriental suscribieron el Convenio Constitutivo el 23 de julio
de 2002, con lo cual entró en vigor su ingreso.
Datos: Departamento de Tesorería del FMI
|
|
¿Qué es el DEG?
El FMI creó el DEG en 1969, como activo internacional de reserva, para
complementar los activos de reserva de los países miembros. El DEG es
la unidad de cuenta del FMI y de algunos organismos internacionales
y regionales.
El DEG es un activo exclusivamente oficial, que mantienen los países
miembros, el FMI y algunos otros organismos internacionales. Se utiliza
principalmente en transacciones con el FMI, ya sea cuando los países
miembros liquidan sus obligaciones con la institución, algunas de las
cuales deben pagarse en DEG, o cuando ésta les paga intereses o desembolsa
préstamos.
Valoración del DEG al 19 de
agosto de 2002 |
Moneda |
Monto de moneda
|
Tipo de cambio1
|
Equivalente en US$
|
Euro |
0,4260
|
0,98060
|
0,417736
|
Yen japonés |
21,0000
|
118,67000
|
0,176961
|
Libra esterlina |
0,0984
|
1,53800
|
0,151339
|
Dólar de EE.UU. |
0,5770
|
1,00000
|
0,577000
|
|
|
|
Total 1.323036
|
DEG 1 = US$1,32304
US$1 = DEG 0,755837
1Tipo de cambio expresado en
unidades monetarias por dólar de EE.UU., salvo los tipos
de cambio del euro y de la libra esterlina, que se expresan
en dólares de EE.UU. por unidad monetaria.
Datos: Departamento de Tesorería del FMI
|
|
¿Cómo se asignan los DEG?
El FMI asigna DEG a los países miembros en proporción a sus cuotas.
La última asignación, que elevó el total de asignaciones a los entonces
141 países miembros a DEG 21.400 millones, fue en enero de 1981.
Las asignaciones de DEG no constituyen préstamos; los países pueden
utilizarlos para financiar necesidades de balanza de pagos sin tener
que tomar medidas de política económica ni contraer obligaciones de
rembolso. No obstante, cuando un país utiliza sus DEG debe pagar intereses
sobre el monto en el que sus asignaciones superan sus tenencias. Cuando
un país mantiene DEG por un monto superior a su asignación devenga intereses.
Más de la quinta parte de los países miembros nunca han recibido asignaciones
de DEG porque ingresaron al FMI después de la última asignación. Algunos
no han participado en todas las asignaciones.
Para que las asignaciones acumuladas de DEG de todos los países asciendan
a un nivel uniforme del 29% de la cuota, en septiembre de 1997, la Junta
de Gobernadores adoptó una resolución para enmendar el Convenio Constitutivo
del FMI, a fin de autorizar una asignación especial de DEG 21.400 millones
de carácter excepcional. Cuando se apruebe la cuarta enmienda, se multiplicará
por dos el nivel actual de asignaciones acumuladas de DEG. La enmienda
propuesta debe ser aprobada por las tres quintas partes de los países
miembros (110) que representen el 85% del total de votos del FMI. A
mediados de agosto de 2002, 121 países, con el 73% del total de votos,
habían ratificado la propuesta. Por lo tanto, con la aprobación de Estados
Unidos entraría en vigor la enmienda.
¿Cómo se determina el valor del DEG?
El valor del DEG se basa en el valor de una cesta de mo- nedas. Las
fluctuaciones del tipo de cambio de una de las monedas que la componen
tenderán a ser contrarrestadas en parte o en su totalidad por las de
las demás monedas. Por consiguiente, el valor del DEG suele ser más
estable que el de cada una de las monedas de la cesta, lo que le convierte
en una unidad de cuenta útil.
La composición de la cesta se revisa cada cinco años para que las monedas
que la integran correspondan a las que se utilizan en las transacciones
internacionales y que sus ponderaciones reflejen su importancia relativa
en el sistema comercial y financiero mundial.
La última modificación de la cesta de valoración se produjo en el año
2001 cuando se introdujo el euro. La nueva cesta está integrada por
el dólar de EE.UU., el euro, el yen japonés y la libra esterlina. Su
valor se determina diariamente basándose en los tipos de cambio del
medio día del mercado de Londres, y se publica en el sitio web del FMI..
Determinación de la tasa de interés del DEG
La tasa de interés del DEG es la base para calcular los intereses que
se cobran por el financiamiento ordinario del FMI y la tasa de interés
que se paga a los países acreedores de la institución. La tasa, que
se ajusta semanalmente, equivale a la media ponderada de las tasas de
interés de ciertos instrumentos nacionales a corto plazo que cotizan
en los mercados de las monedas que integran la cesta de valoración del
DEG y se publica cada semana en el sitio web del FMI. La tasa de interés
del DEG para la semana que se inició el 26 de agosto de 2002 era del
2,23%.
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Horst Köhler, alemán, se convirtió en el
octavo Director Gerente del FMI en mayo de 2000. |
Anne O. Krueger, estadounidense, ocupa el
cargo de Primera Subdirectora Gerente del FMI desde septiembre
de 2001. |
Shigemitsu Sugisaki, japonés, asumió el cargo
de Subdirector Gerente del FMI en febrero de 1997. |
Eduardo Aninat, chileno, se desempeña como
Subdirector Gerente del FMI desde diciembre de 1999. |
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Directorio Ejecutivo del FMI
(Al 15 de agosto de 2002) |
Director
Suplente
Votos emitidos por1
(Porcentaje del total del FMI)
Vacante
Meg Lundsager
Estados Unidos
(371.743–17,11%)
Ken Yagi
Haruyuki Toyama
Japón
(133.378–6,14%)
Karlheinz Bischofberger
Ruediger von Kleist
Alemania
(130.332–6,00%)
Pierre Duquesne
Sébastien Boitreaud
Francia
(107.635–4,95%)
Thomas W. Scholar
Martin A. Brooke
Reino Unido
(107.635–4,95%)
Willy Kiekens (Bélgica)
Johann Prader (Austria)
Austria
Belarús
Bélgica
Eslovenia
Hungría
Kazajstán
Luxemburgo
República Checa
República Eslovaca Turquía
(111.696–5,14%)
J. de Beaufort Wijnholds
(Países Bajos)
Yuriy G. Yakusha (Ucrania)
Armenia
Bosnia y Herzegovina
Bulgaria
Croacia
Chipre
Georgia
Israel
Macedonia, ex Rep.
Yugoslava
de
Moldova
Países Bajos
Rumania
Ucrania
(105.412–4,85%)
Hernán Oyarzábal (Venezuela)
Fernando Varela (España)
Costa Rica
El Salvador
España
Guatemala
Honduras
México
Nicaragua
Venezuela, República
Bolivariana
de
(92.989–4,28%)
Pier Carlo Padoan (Italia)
Harilaos Vittas (Grecia)
Albania
Grecia
Italia
Malta
Portugal
San Marino
(90.636–4,17%)
Ian E. Bennett (Canadá)
Nioclás A. O’Murchú
(Irlanda)
Antigua y Barbuda
Bahamas, Las
Barbados
Belice
Canadá
Dominica
Granada
Irlanda
Jamaica
Saint Kitts y Nevis
Santa Lucía
San Vicente y las Granadinas
(80.636–3,71%)
|
Ólafur Ísleifsson (Islandia)
Benny Andersen (Dinamarca)
Dinamarca
Estonia
Finlandia
Islandia
Letonia
Lituania
Noruega
Suecia
(76.276–3,51%)
Michael J. Callaghan (Australia)
Diwa Guinigundo (Filipinas)
Australia
Corea
Filipinas
Islas Marshall
Islas Salomón
Kiribati
Micronesia, Estados
Federados
de
Mongolia
Nueva Zelandia
Palau
Papua Nueva Guinea
Samoa
Seychelles
Vanuatu
(72.423–3,33%)
Sulaiman M. Al-Turki
Ahmed Saleh Alosaimi
Arabia Saudita
(70.105–3,23%)
Cyrus Rustomjee (Sudáfrica)
Ismaila Usman (Nigeria)
Angola
Botswana
Burundi
Eritrea
Etiopía
Gambia
Kenya
Lesotho
Liberia
Malaw
Mozambique
Namibia
Nigeria
Sierra Leona
Sudáfrica
Sudán
Swazilandia
Tanzanía
Uganda
Zambia
Zimbabwe
(69.968–3,22%)
Dono Iskandar Djojosubroto (Indonesia)
Kwok Mun Low (Singapur)
Brunei Darussalam
Camboya
Fiji
Indonesia
Malasia
Myanmar
Nepal
República Democrática
Popular
Lao
Singapur
Tailandia
Tonga
Vietnam
(68.367–3,15%)
A. Shakour Shaalan (Egipto)
Mohamad B. Chatah (Líbano)
Bahrein, Reino de
Egipto
Emiratos Árabes Unidos
Iraq
Jordania
Kuwait
Líbano
Libia
Maldivas
Omán
Qatar
República Árabe
Siria
Yemen, República del
(64.008–2,95%)
|
WEI Benhua
Wang Xiaoyi
China
(63.942–2,94%)
Aleksei V. Mozhin
Andrei Lushin
Rusia
(59.704–2,75%)
Roberto F. Cippà (Suiza)
Wieslaw Szczuka (Polonia)
Azerbaiyán
Polonia
República Kirguisa
Suiza
Tayikistán
Turkmenistán
Uzbekistán
(56.900–2,62%)
Murilo Portugal (Brasil)
Suplente (vacante)
Brasil
Colombia
Ecuador
Guyana
Haití
Panamá
República Dominicana
Suriname
Trinidad y Tabago
(53.422–2,46%)
Yaga V. Reddy (India)
R.A. Jayatissa (Sri Lanka)
Bangladesh
Bhután
India
Sri Lanka
(52.112–2,40%)
Abbas Mirakhor
(República Islámica del Irán)
Mohammed Daïri (Marruecos)
Argelia
Ghana
Marruecos
Pakistán
República Islámica
del Irán
Túnez
(51.793–2,38%)
A. Guillermo Zoccali (Argentina)
Guillermo Le Fort (Chile)
Argentina
Bolivia
Chile
Paraguay
Perú
Uruguay
(43.395–2,00%)
Alexandre Barro Chambrier (Gabón)
Damian Ondo Mañe (Guinea Ecuatorial)
Benin
Burkina Faso
Camerún
Cabo Verde
Chad
Comoras
Congo, Rep. del
Côte d’Ivoire
Djibouti
Gabón
Guinea
Guinea-Bissau
Guinea Ecuatorial
Madagascar
Malí
Mauritania
Mauricio
Níger
República Centroafricana
Rwanda
Santo Tomé y Príncipe
Senegal
Togo
(25.169–1,16%)
|
1Al 1 de agosto de
2002, los votos de los países miembros sumaban 2.172.661,
y los votos en el Directorio Ejecutivo 2.159.676. En esta
última cifra no se incluyen los votos del Estado Islámico
del Afganistán, la República Democrática del Congo, la República
Federativa de Yugoslavia, Somalia y Timor Oriental, que no
participaron en la elección ordinaria de directores ejecutivos
en 2000. |
|
Cronología
En estos doce años
Dos son las características emblemáticas del FMI, que quedan plasmadas
en la aplicación de la política económica que aquí se examina: su universalidad
y la consiguiente responsabilidad de cooperar con cada uno de sus miembros
en materia de política económica, y su flexibilidad, es decir,
la capacidad de adaptar sus actividades rápidamente a las exigencias
de una economía mundial en continua evolución. Es una institución en
constante “autorreforma” que no olvida sus obligaciones frente a la
totalidad de sus miembros.
En los últimos años, esto ha implicado tres importantes retos: el ritmo
al que avanza la globalización, con sus mayores oportunidades y riesgos;
la transición de una economía planificada a otra de mercado en muchos
países, y una labor más intensa de ayuda a los países más pobres del
mundo.
En el futuro, se prevé que habrá una integración más profunda de los
mercados mundiales, pero surgirán nuevos desafíos, como el envejecimiento
de la población y el potencial de una agudización del extremismo y de
la violencia si no se logra poner freno a la tendencia al aumento de
la desigualdad entre los países más pobres y los más ricos.
Qué ocurrió en el FMI…
|
Mezquita de Bebi Heybat y la bahía de Baku, Azerbaiyán. |
1990
- Se amplían temporalmente los servicios financieros para apoyar a
los países afectados por la crisis del Oriente Medio.
- El Comité Provisional se pronuncia en favor de que las cuotas aumenten
un 50%.
1991
- En un estudio conjunto (FMI, Banco Mundial, Organización de Cooperación
y Desarrollo
- Económicos y Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo) de la
economía soviética se recomienda efectuar reformas.
- Los países de la antigua U.R.S.S. reciben asistencia técnica.
1992
- Entra en vigor el aumento de cuotas.
El Directorio aprueba el ingreso de los países de la antigua U.R.S.S.
en el FMI.
- La tercera enmienda del Convenio Constitutivo permite a los países
miembros con atrasos establecer un historial de política económica
y pagos y acumular derechos para efectuar giros en el futuro.
- Aumentan de 22 a 24 los miembros del Directorio Ejecutivo.
1993
- Se crea el servicio para la transformación sistémica
(STS) a fin de ayudar a los países en la transición de la economía
planificada a la de mercado.
1994
- En la Declaración de Madrid se pide a los países industriales sustentar
el crecimiento, reducir el desempleo y evitar un repunte de la inflación;
a los países en desarrollo ampliar el crecimiento, y a los países
en transición aplicar audaces medidas de estabilización y reforma.
- Se inicia una nueva era de transparencia.
- Se aprueban acuerdos a favor de 13 países de la zona del franco
CFA.
1995
- Se aprueba un acuerdo de derecho de giro por DEG 12.100
millones (unos US$17.800 millones) a favor de México.
|
Gran parte de los pobres del mundo viven en África. |
1996
- Se aprueba un acuerdo ampliado por DEG 6.900 millones (unos US$10.100
millones) a favor de Rusia.
El FMI define normas para los datos de los países miembros.
- Se aprueban la Iniciativa para los países pobres muy endeudados
(PPME) y el financiamiento permanente para el servicio reforzado de
ajuste estructural (SRAE).
- Se crea un sitio en Internet como parte del plan de transparencia
[www.imf.org].
1997
- Si los países lo consienten, se emiten notas de información al público
al término de las consultas del FMI.
- La Junta de Gobernadores aprueba la cuarta enmienda, que establece
una asignación especial de DEG.
- Se crea el servicio de complementación de reservas (SCR).
- Se aprueban los Nuevos Acuerdos para la Obtención de Préstamos (NAP).
- Se activan el SCR y los NAP y se aprueba un acuerdo de derecho de
giro por DEG 5.500 millones a favor de Corea.
1998
- Se activan los Acuerdos Generales para la Obtención de Préstamos
(AGP) a favor de Rusia.
- Se activan los NAP a favor de Brasil.
- Frente a los grandes problemas de la economía mundial, la Junta
de Gobernadores acoge el concepto de una nueva “arquitectura financiera”.
1999
- El nuevo Banco Central Europeo ingresa como observador al FMI.
- Se crean las líneas de crédito contingente para ofrecer a los países
que aplican buenas políticas protección frente a las crisis en otros
países.
- La revaluación de las tenencias de oro ayuda a financiar el Fondo
Fiduciario SRAE-PPME.
- Aumentan las cuotas el 45%.
- Se remplaza el SRAE por el servicio para el crecimiento y la lucha
contra la pobreza.
- Se refuerza la Iniciativa PPME para brindar un alivio mayor y más
oportuno.
- El Comité Provisional se transforma en el Comité Monetario y Financiero
Internacional.
|
Operadores de la bolsa de São Paulo, Brasil, negocian
durante la crisis cambiaria del país. |
2000
- Fuerte impulso para que los países habilitados en el marco de la
- Iniciativa PPME alcancen el punto de decisión.
- Se toman medidas para vigilar más de cerca el uso de los recursos
por los países prestatarios.
- Se crea la Oficina de Evaluación Independiente para evaluar las
operaciones y políticas.
- Se racionalizan los servicios financieros.
2001
- Se crea el Departamento de Mercados Internacionales de Capital para
reforzar la supervisión y la prevención y gestión de crisis.
- Se racionaliza la condicionalidad; se hace hincapié en la identificación
de los países con las reformas.
- Aumenta a DEG 6.400 millones la cuota de China (unos US$8.300 millones).
- La Primera Subdirectora Gerente propone un mecanismo para ayudar
a los deudores soberanos y sus acreedores a resolver los problemas
de endeudamiento.
2002
- Mayor atención a los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
- Se aprueba un acuerdo de derecho de giro por US$30.000 millones
a favor de Brasil.
…y en el mundo
|
Habitantes de Berlín Occidental observan la demolición
del Muro de Berlín en noviembre de 1989. |
1990
- Crisis del Oriente Medio.
- Se unen las dos Alemanias (y sus monedas).
- Creación del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo.
1991
- Disolución de la Unión Soviética y de Yugoslavia.a
- El Tratado de Maastricht crea la Unión Europea.
- Creación del MERCOSUR (mercado común para Argentina, Brasil, Paraguay
y Uruguay).
1992
- Se inicia una profunda contracción económica en Japón.
- Se firma el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
- Crisis del mecanismo de tipos de cambio (MTC) europeo.
1993
1994
- Crisis de la deuda de México.
- La Organización Mundial del Comercio remplaza al Acuerdo General
sobre Aranceles Aduaneros y Comercio.
- Devaluación del franco CFA.
|
La RAE de Hong Kong se prepara para celebrar el
cambio de milenio. |
1995
- La crisis mexicana repercute en los mercados financieros de América
Latina.
- Se llega a un acuerdo comercial en la Ronda Uruguay.
1996
- Empeoran los problemas de algunos países pobres muy
endeudados.
1997
- China recupera la soberanía sobre Hong Kong.
- Se desploma el baht de Tailandia; el contagio afecta a Corea y al
sudeste de Asia.
|
Torres del Centro Mundial del Comercio poco después
de los ataques terroristas. |
|
Una escultura del símbolo del euro marca la introducción
de la nueva moneda en Alemania. |
1998
- La crisis de Asia se propaga y llega a Brasil y Rusia.
- Desplome del hedge fund Long Term Capital Management.
- Se inaugura la primera bolsa de valores regional en Abidján, que
reúne a ocho países de África occidental.
1999
- Introducción del euro (moneda única europea) en 11 países.
2000
- Informe de la Comisión Meltzer sobre la función y eficacia del FMI
y los bancos multilaterales de desarrollo.
- Jubileo 2000 pide la condonación total de la deuda.
- Cumbre de líderes de África para examinar la pobreza y el crecimiento.
2001
- Se inicia la recesión en Estados Unidos.
- Terroristas atacan a Estados Unidos el 11 de septiembre.
- China y la provincia china de Taiwan ingresan a la OMC en la reunión
de Doha.
- Crisis bancaria en Turquía.
2002
- Cesación de pagos de Argentina, la mayor en la historia.
- El euro comienza a circular en remplazo de las monedas de 12 países
europeos.
- Conferencia de la ONU sobre la Financiación para el Desarrollo,
en Monterrey, México.
- Nueva Asociación para el Desarrollo de África.
Fondo Monetario Internacional: Organigrama
EI FMI: Datos básicos
¿Cuándo se creó el FMI? |
Se fundó en 1945 e inició sus operaciones
financieras el 1 de marzo de 1947. |
¿Cuántos países lo integran? |
184 países. |
¿Cuáles son sus órganos rectores? |
La Junta de Gobernadores y el Directorio
Ejecutivo. |
¿Quién dirige el FMI? |
Horst Köhler es su Director Gerente. |
¿Cuántos empleados tiene el FMI? |
Alrededor de 2.650, provenientes de 140 países. |
¿A cuánto ascienden sus recursos? |
A DEG 212.700 millones (unos US$283.000 millones). |
Fines principales
- Fomentar la cooperación monetaria
internacional.
- Facilitar la expansión y el crecimiento
equilibrado del comercio internacional.
- Fomentar la estabilidad cambiaria
y procurar que los países miembros mantengan regímenes
de cambios ordenados.
- Coadyuvar a establecer un sistema
multilateral de pagos para las transacciones corrientes
que se realicen entre los países miembros, y eliminar
las restricciones cambiarias que dificulten la expansión
del comercio mundial.
- Poner temporalmente los recursos
generales del FMI a disposición de los países miembros
para darles la oportunidad de corregir los desequilibrios
de sus balanzas de pagos sin recurrir a medidas perniciosas
para la prosperidad nacional o internacional.
- Acortar la duración y aminorar
el grado de desequilibrio de las balanzas de pagos de
los países miembros.
|
Principales esferas de actividad
- Supervisión o evaluación de las
políticas macroeconómicas que adoptan los países miembros
dentro del marco de un análisis integral del clima económico
general y la estrategia de política económica de cada
país.
- Asistencia financiera, en forma
de créditos y préstamos a los países miembros con dificultades
de balanza de pagos, para respaldar políticas de ajuste
y reforma.
- Asistencia técnica, que consiste
en asesoramiento y respaldo financiero a los países miembros
en varios ámbitos, como el diseño y la aplicación de políticas
fiscales y monetarias, el desarrollo institucional (bancos
centrales y tesorerías), la recopilación y mejora de los
datos estadísticos y la capacitación de funcionarios del
gobierno
|
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Credits
Fotos: Denio Zara, Padraic Hughes, Pedro Márquez y Michael
Spilotro, del FMI, págs. 1, 15, 18, 26 y 29; Antony Njuguna, Reuters,
pág. 2; Reuters, pág. 3; Georges Gobet, AFP, pág. 3; STR, Reuters, pág.
8; Luke Hunt, AFP, pág. 9; FMI, pág. 25; Shamil Zhumatov, Reuters, pág.
30; Gerard Malie, AFP, pág. 30; Mike Hutchings, Reuters, pág. 31; Robyn
Beck, AFP, pág. 31; Boris Roessler, AFP, pág. 31; Mauricio Lima, AFP,
pág. 31.
Arte: Massoud Etemadi, del FMI, págs. 11, 13 y 16; Miel,
Cartoonist & Writers Syndicate, pág. 20.
Laura Wallace
Directora
Sheila Meehan
Elisa Diehl
Natalie Hairfield
Jacqueline Irving
Redactoras
Lijun Li
Kelley McCollum
Ayudantes de redacción
Philip Torsani
Director de artes gráficas
Julio R. Prego
Diseñador gráfico
_______
Con la colaboración de
Prakash Loungani
Edición en español
División de Español
Departamento de Tecnología
y Servicios Generales
Rodrigo Ferrerosa
Traducción
Virginia Masoller y
Adriana Vilar de Vilariño
Corrección de pruebas
Christine K. Brown
Autoedición
El Boletín (ISSN 0250-7240) es una publicación del FMI.
Durante el año aparecen 23 números en español, francés e inglés, además
del Suplemento sobre el FMI y un índice anual. Las opiniones e información
pu- blicadas no representan necesariamente la posición oficial del FMI.
Los mapas que se publican para orientar a los lectores provienen de
la sexta edición de Atlas of the World, de National Geographic; los
nombres y las fronteras que aparecen en los mismos no reflejan la posición
del FMI con respecto a la situación jurídica de ningún territorio, ni
tampoco la conformidad de la institución en relación con dichas fronteras.
El material publicado puede reproducirse mencionando la fuente de información.
Las cartas a la directora deben dirigirse a: Current Publications Division,
Room IS7-1100, IMF, Washington, D.C., 20431, EE.UU. Tel.: (202) 623-8585;
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y México: first class; otros países: airspeed). El precio de la suscripción
anual, para empresas privadas y particulares, es de US$79. Las solicitudes
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Correo electrónico:publications@imf.org.
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