Comunicado de la Trigésima Reunión del Comité Monetario y Financiero Internacional
11 de octubre de 2014
Bajo la presidencia del Sr. Tharman Shanmugaratnam, Viceprimer Ministro de Singapur y Ministro de HaciendaComunicado de Prensa No. 14/466 (S)
11 de octubre de 2014
La recuperación mundial continúa, pero es desigual y más débil de lo previsto, y han aumentado los riesgos a la baja. Estamos comprometidos a elevar el crecimiento y a crear una economía mundial más robusta, sostenible, equilibrada y con abundante empleo. Pondremos en marcha medidas enérgicas y de gran alcance para vigorizar la demanda y eliminar las restricciones a la oferta mediante políticas macroeconómicas adecuadas y reformas estructurales críticas; encauzar la deuda pública en una trayectoria sostenible; salvaguardar la estabilidad financiera; reforzar la cooperación con el fin de gestionar las repercusiones; y seguir reequilibrando la demanda mundial. Estamos sumamente preocupados por el impacto humano y socioeconómico del ébola. Celebramos la Agenda Mundial de Políticas de la Directora Gerente.
Economía mundial. La recuperación desigual continúa, a pesar de los reveses.Varios países se enfrentan a la perspectiva de un crecimiento bajo o en proceso de desaceleración, con un desempleo que sigue siendo inaceptablemente elevado. En algunas economías avanzadas está en curso un repunte de la actividad económica, particularmente en Estados Unidos y el Reino Unido. La recuperación es moderada en Japón, y vacilante en la zona del euro. El crecimiento sigue siendo firme y debería aumentar moderadamente en muchas economías de mercados emergentes, y en general seguirá siendo pujante en los países en desarrollo de bajo ingreso. Los riesgos a la baja se derivan de los desafíos relacionados con la normalización de la política monetaria en algunas economías avanzadas, el período prolongado de inflación inferior a las metas en otras, el aumento de la toma de riesgos en un entorno de baja volatilidad en los mercados financieros y la agudización de las tensiones geopolíticas.
Garantizar un crecimiento robusto, duradero e inclusivo. Nuestra prioridad máxima tiene que ser reforzar el crecimiento real de hoy en día y el crecimiento potencial de mañana, y al mismo tiempo garantizar la capacidad de resistencia y la sostenibilidad. En las economías con capacidad económica ociosa deberían continuar las políticas macroeconómicas expansivas, y en todos los países deberían implementarse con firmeza reformas estructurales de importancia crítica. Habrá que prestar especial atención a las medidas orientadas a estimular la demanda y oferta de mano de obra, entre otras formas reduciendo el desempleo juvenil y ampliando las oportunidades para la mujer y los trabajadores de más edad en la economía; mejorar los flujos de crédito a los sectores productivos; y reforzar el entorno empresarial para apoyar la inversión privada. La inversión adicional pública y privada en infraestructura también es importante para apoyar la recuperación y elevar el crecimiento potencial, particularmente en los países con necesidades claramente definidas, capacidad económica ociosa y espacio fiscal. Todos los países se beneficiarán de un aumento de la eficiencia de la inversión.
Política fiscal. Las estrategias fiscales deben seguir ejecutándose de manera flexible para apoyar el crecimiento y la creación de empleo, al tiempo que la deuda como proporción del PIB se encauza en una trayectoria sostenible. A fin de reforzar la contribución de las estrategias fiscales al crecimiento, los países deben considerar introducir cambios en la composición y la calidad del gasto público y el ingreso público. La formulación e implementación de planes concretos de consolidación fiscal a mediano plazo sigue siendo crucial en muchas economías avanzadas. Las economías de mercados emergentes y los países en desarrollo de bajo ingreso deben recomponer sus defensas fiscales según sea necesario, entre otras formas a través de la movilización de ingresos públicos. Los países deberían afianzar los marcos institucionales para gestionar los riesgos fiscales, y al mismo tiempo reorientar el gasto hacia los servicios públicos esenciales y mejorar la focalización de los subsidios.
Política monetaria. La política monetaria en las economías avanzadas continúa apoyando la recuperación y debe abordar el problema de un período prolongado de inflación inferior a las metas de manera oportuna, teniendo presentes los riesgos para la estabilidad financiera y en consonancia con los mandatos de los bancos centrales. Será necesario, en su debido momento, normalizar la política monetaria en un contexto de crecimiento más sólido y de estabilidad de precios. Una normalización cuidadosamente calibrada y debidamente comunicada reduciría a un mínimo los efectos negativos de contagio y de rebote, y beneficiaría a la economía mundial. Las economías de mercados emergentes deben recomponer los márgenes de maniobra para la aplicación de políticas en los casos en que dichos márgenes sean limitados. Las políticas macroeconómicas tienen que ser sólidas y, en tal sentido, se debe permitir que los tipos de cambio respondan a la evolución de los fundamentos económicos y faciliten el ajuste externo. Cuando se deba hacer frente a riesgos para la estabilidad macroeconómica y financiera derivados de una cuantiosa afluencia de capitales volátiles, el ajuste necesario de política macroeconómica podría estar respaldado por medidas prudenciales y, según corresponda, por medidas de gestión de flujos de capitales.
En todos los países sigue siendo prioritario incrementar la capacidad de resistencia del sistema financiero, entre otras formas mediante políticas micro y macroprudenciales bien concebidas en el contexto de un período prolongado de laxitud monetaria y toma excesiva de riesgos en ciertos mercados de activos.
Cooperación y coherencia en materia de políticas. Los desequilibrios mundiales han disminuido por razones tanto estructurales como cíclicas, pero su reequilibrio sigue siendo una prioridad básica, que exige medidas continuas por parte de los países tanto deficitarios como superavitarios. Las reformas de la regulación financiera mundial deben ejecutarse sin demora y de manera coherente, entre otras formas abordando el problema de las entidades demasiado grandes para quebrar mediante requisitos de capitalización y regímenes de resolución eficaces, armonizando la aplicación transfronteriza de las reglas sobre instrumentos derivados extrabursátiles y mitigando los riesgos potenciales para la estabilidad financiera que emanan de la banca paralela. Respaldamos las labores que está llevando adelante el FMI en materia de tributación y movilización de ingresos a escala internacional, entre otros aspectos para abordar la evasión y la elusión tributaria y para mejorar la transparencia fiscal, en estrecha cooperación con los organismos internacionales pertinentes. Es necesario seguir avanzando en la tarea de mejorar la transparencia de la propiedad efectiva de las empresas y otros instrumentos jurídicos, incluidos los fideicomisos. Subrayamos la importancia de fortalecer el sistema mundial de comercio para fomentar el crecimiento.
Crédito y supervisión del FMI. Encomiamos la ampliación de la asistencia del FMI a Guinea, Liberia y Sierra Leona, países afectados por el ébola, y solicitamos un continuo apoyo a dicha asistencia. Apoyamos asimismo la mayor interacción del FMI con los Estados en situación frágil. Solicitamos que el FMI mantenga los esfuerzos que realiza con los Estados pequeños. Respaldamos la continua interacción del FMI con los países árabes en transición y hacemos un llamado a la comunidad internacional para que refuerce su apoyo a estos países, entre otras formas mediante la implementación de la Asociación de Deauville. Solicitamos al FMI que trabaje estrechamente con el Banco Mundial y otras instituciones internacionales para brindar apoyo a los países afectados por la crisis humanitaria en Oriente Medio, con el fin de mitigar los efectos adversos en las economías de la región y su propagación a la economía mundial.
La exención temporal de las tasas de interés en los préstamos otorgados entre 2009 y 2014 en el marco del Fondo Fiduciario para el Crecimiento y la Lucha contra la Pobreza (FFCLP) ha beneficiado a los países de bajo ingreso. Solicitamos al FMI, en su calidad de administrador fiduciario del fondo, que considere una nueva prórroga temporal del alivio en materia de intereses, al tiempo que salvaguarda la capacidad de autosustentación del FFCLP.
Hacemos hincapié en la importancia de una adecuada red mundial de protección financiera. El FMI debe seguir apoyando, inclusive sobre una base precautoria, la realización de ajustes y reformas apropiados para ayudar a protegerse contra riesgos.
Celebramos el Examen Trienal de la Supervisión, el examen del Programa de Evaluación del Sector Financiero (PESF) y las actividades en curso para formular asesoramiento en materia de política macroprudencial. Solicitamos que se profundicen los análisis sobre riesgos, repercusiones y el sector externo; que se refuerce y se integre mejor la supervisión financiera y macroeconómica; que se integren la supervisión bilateral y multilateral; y que se brinde un asesoramiento en materia de políticas que sea imparcial, individualizado y debidamente comunicado. Destacamos la importancia de las consultas regulares entre el FMI y todos los países miembros. Celebramos las labores relacionadas con las cláusulas pari passu modificadas y las cláusulas de acción colectiva reforzadas, y solicitamos al FMI, a sus países miembros y al sector privado que promuevan activamente su uso en las nuevas emisiones internacionales de bonos soberanos. Esperamos con interés la continuación de las labores en torno a las cuestiones relacionadas con la reestructuración de la deuda soberana, el examen de los programas para crisis y la conclusión del examen de la política sobre límites de endeudamiento, combinando la flexibilidad y la preservación de la sostenibilidad de la deuda en la manera en que se enfoquen los límites de endeudamiento para los países de bajo ingreso.
Estructura de gobierno. Estamos profundamente decepcionados por el continuo retraso en los avances de las reformas del régimen de cuotas y la estructura de gobierno del FMI acordadas en 2010 y la Decimoquinta Revisión General de Cuotas, incluida una nueva fórmula para el cálculo de las cuotas. Reafirmamos la importancia que tiene el FMI como una institución basada en cuotas. La ejecución de las reformas de 2010 sigue siendo nuestra máxima prioridad y exhortamos firmemente a Estados Unidos a que ratifique estas reformas a la mayor brevedad. Estamos comprometidos con la tarea de que el FMI siga siendo una institución sólida y dotada con recursos adecuados. Si las reformas de 2010 no se ratifican a más tardar para finales de año, solicitaremos al FMI que, partiendo de la labor ya realizada, tenga preparadas opciones para guiar los próximos pasos, y programaremos una deliberación sobre dichas opciones.
Próxima reunión del CMFI. Nuestra próxima reunión tendrá lugar en la ciudad de Washington el 17–18 de abril de 2015.
La lista de asistentes figura en: http://0-www-imf-org.library.svsu.edu/external/spanish/am/2014/imfc/attendees/index.htm
DEPARTAMENTO DE COMUNICACIONES DEL FMI
Relaciones públicas | Relaciones con los medios de comunicación |
|||
---|---|---|---|---|
E-mail: | publicaffairs@imf.org | E-mail: | media@imf.org | |
Fax: | 202-623-6220 | Phone: | 202-623-7100 |